Vidrala conservará la propiedad de todo el producto terminado fabricado en la planta hasta la fecha de cierre, así como de algunos otros elementos productivos, como moldes utilizables en otras plantas del grupo. La transacción también incluye la formalización de un acuerdo de suministro, por el cual Vidrala adquirirá parte de la producción de la referida planta belga, durante un período de cinco años, garantizando de esta forma el servicio al cliente a medida que se desarrolla el plan inversor para el reemplazo de capacidades productivas actualmente en marcha dentro del grupo.

Vidrala vende por dos euros su planta en Bélgica a Saverglass

El impacto final de la transacción en el resultado consolidado de Vidrala se detallará en los estados financieros correspondientes al ejercicio 2019. De manera preliminar, se estima que la transacción genere una pérdida por enajenación de activos de aproximadamente 5 millones de euros. La venta de la actividad manufacturera en Bélgica se enmarca en la estrategia de Vidrala de focalizarse en centros productivos que sean "competitivos y estratégicos".

La desinversión permitirá la ejecución de los proyectos de inversión que han sido definidos "con el firme objetivo de optimizar el servicio al cliente y de acuerdo con la marcada ambición industrial de largo plazo del grupo", apunta en un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Vidrala tiene en Bélgica al 7% de sus 3.732 empleados, es decir, la operación implicará a 261 trabajadores. Uno de los motivos de su marcha del país es el alto coste laboral que implicaba su plantilla en Bélgica.

 

Tras anunciar esta venta, las acciones de Vidrala se revalorizan un 1,8% este lunes. En lo que va de año, sus títulos suben un 30% en el mercado continuo.