El déficit del Estado en el primer semestre es consecuencia de unos pagos que se situaron en 71.617 millones de euros, con un aumento del 10%, y de unos ingresos que ascendieron a 66.934 millones de euros, lo que supone un descenso del 4,8%.En términos de caja, que computa los ingresos y gastos que efectivamente se han realizado durante el periodo, el Estado alcanzó un déficit de 2.065 millones de euros, frente al superávit de 4.168 millones del mismo periodo del año anterior.