Insur da tres argumentos para defender la resiliencia de la vivienda en España

“Si hablamos de promociones residenciales -afirman desde la compañía-, durante la pandemia en 2020, la demanda de vivienda se vio resentida ante la incertidumbre generada por el Covid-19”; si bien, esto ha permitido que en el periodo posterior, el sector inmobiliario residencial español se haya visto beneficiado por una demanda embalsada que busca y exige un tipo de vivienda con unas características adaptadas a las nuevas necesidades de los clientes, como las que Grupo Insur ofrece.

Desde la firma se enfatizan tres aspectos claves para entender la más que compleja coyuntura actual. En primer lugar, que el precio medio de la vivienda en España está todavía en términos nominales, en torno a un 20% por debajo del precio máximo al ciclo anterior. Por otro lado, que la tasa de esfuerzo regular de las familias para afrontar el pago de la financiación de su vivienda está en alrededor el 30% frente a niveles superiores al 50% alcanzados en el pico del anterior ciclo, y que la tasa de accesibilidad (precio medio de la vivienda/renta bruta disponible por hogar) se sitúa en valores más saludables que los registrados en 2007. Y finalmente que, durante todo el ciclo de crecimiento tras la anterior crisis inmobiliaria, tan solo se ha promovido de media 60.000 viviendas al año, cuando la media histórica en los últimos treinta años era de 250.000 viviendas.

En cuanto al segmento de oficinas, en Grupo Insur “visualizamos igualmente unas perspectivas favorables para la promoción de oficinas”. En este entorno post-Covid, las compañías demandan activos innovadores, sostenibles y saludables para el desarrollo del trabajo de sus empleados, con una clara apuesta global hacia la transición ecológica. Y, en este sentido, “hemos estado a la vanguardia en la transformación de sus activos existentes para adaptarse a estas nuevas necesidades y tiene el foco puesto en la promoción de otros nuevos proyectos en las plazas más demandadas en la actualidad como Málaga y Madrid”.

En la situación actual en la que el sector inmobiliario se está viendo afectado por una subida de costes de construcción con un consecuente incremento en el precio de venta de las viviendas, desde Grupo Insur "nos gustaría recalcar que en cuanto a la demanda nacional no estamos notando por el momento reducción de transacciones y en relación a la demanda internacional vemos un interés creciente incentivado por la guerra en Ucrania por las segundas residencias en las zonas de costa, como la Costa del Sol, donde tenemos importantes proyectos en marcha". En cuanto a hipotecas, “todavía no estamos percibiendo restricciones a su concesión, aunque sí se constatan subidas en ellas, especialmente las de tipo fijo”. Un alza del dinero unido al aumento de los precios de las viviendas “afectará más a las familias con menor poder adquisitivo y a las viviendas de más bajo nivel” donde Grupo Insur no está posicionado.

En opinión de Insur las rentas más bajas van a ser las más afectadas por la creciente inflación, pero a favor del mercado español juega que la oferta de viviendas en el mercado español aún no compensa la alta demanda existente y que la incertidumbre actual está compensada con el hecho de que la vivienda es un activo refugio ante entornos inflacionarios. En Grupo Insur anunciamos nuestro plan estratégico 2021-2025 a finales de septiembre y seguimos confiados en entregar en estos 5 años en torno a 2.900 viviendas y 2022 y 2023 van a ser años clave para la Compañía en inversión en suelo para materializar nuestros objetivos del plan, concluyen.