IAG (Iberia) tiene un tiro de piedra la Semana Santa, pero, en lo que de verdad está pensando, es en el verano. La compañía ha perdido algo de combustible en el mercado, incluso con recorte en alguna de sus recomendaciones, pero sigue teniendo un margen importante de mejora, que puede llegar de cara a las vacaciones con recuperación de movilidad.
Pero también de cara a unas conversaciones de paz, con noticias contradictorias entre Rusia y Ucrania, agudizados con los crímenes recogidos en ciudades como Bucha, que puede llevar a una doble vertiente: menor tensión del petróleo y menos incertidumbre en Europa, lo que sin duda ayudaría a la compañía.
En su gráfica de cotización vemos que el valor alcanza ya cuatro sesiones consecutivas a la baja con recortes acumulados que superan el 5,6% a pesar de la remontada que acumula en las últimas cuatro semanas en el mercado, que supera el 19% en lo que va de año, se mantiene con recortes que rozan el 2% para el valor.
Si nos fijamos en las recomendaciones sobre IAG, vemos que Banco Sabadell apuesta por comprar el valor en el mercado, mientras coloca con gran expectativa el repunte del valor. Sí es que, con un precio objetivo de 2,7 euros por acción le otorga un potencial del 61%.
Desde Morgan Stanley, el último en pronunciarse se rebaja su recorrido hasta los 2,30 euros por acción desde los 2,50 anteriores. Eso sí destaca que el valor se verá beneficiado por su escasa exposición a Asia ante el repunte del Covid-19 en la zona y mucha a América, lo que le va a beneficiar este verano. Pero también suponga que la compañía se verá afectada en su rendimiento por la subida del precio del petróleo que se reflejará en el coste del queroseno.
Con anterioridad desde Deutsche Bank se rebajaba su consejo hasta mantener desde comprar y su PO se reducía hasta los 1,83 euros desde los 2.597 euros por acción, al cambio en peniques. De igual forma desde Berenberg el precio objetivo también se corta hasta los 1,77 euros desde los 2.125 anteriores.
IAG “logra rebotar desde el lado inferior del canal bajista de largo plazo en color fucsia y la zona de soporte afectado en torno 1.505 / 1.460 euros por acción. Para obtener un nuevo síntoma positivo, es necesario vulnerar el máximo decreciente anterior situado en 1,8550 euros por acción. Las siguientes resistencias están situadas en las medias móviles simples de medio y largo plazo, y posteriormente, la resistencia relevante de los 2,0730 euros por acción”, como afirma en su análisis el experto independiente Néstor Borrás
IAG en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
Desde los indicadores técnicos de Estrategias de Inversión se ve IAG en modo rebote, con una mejora de un punto hasta los 3 de puntuación total frente a los 10 a los que puede aspirar el valor. Con tendencia bajista, tanto a medio como a largo plazo, momento total mixto, positivo lento y negativo rápido para el valor, con volumen de negocio creciente, a medio y largo plazo y volatilidad, su rango de amplitud, creciente, a medio y largo plazo.
Desde el punto de vista fundamental, la analista de Estrategias de Inversión, María Mira destaca que “en una valoración por ratios y con un BPA estimado para el cierre de 2022 de 0,05€/acción, el mercado descuenta un PER de 29, 25v, no excesivamente caro y más si lo ajustamos por el crecimiento estimado para el BPA, lo que sitúa el PEG en niveles de infravaloración relativa, 0,27v. No está cara por EV/EBITDA, 6,76v”.
Además, señala que “la cuenta de resultados mejorará también si se cumplen previsiones y la valoración por múltiples, pero ya hemos comentado que el riesgo viene por el conflicto en Europa del Este, su impacto en la demanda y principalmente en el precio del combustible."
Y concluye María Mira que, en todo caso, las perspectivas para el negocio de IAG son mejores que en los peores momentos de la pandemia y su balance ha aguantado estoicamente. En base a nuestra valoración fundamental revisamos recomendación neutral para IAG con horizonte temporal de largo plazo. El riesgo sigue siendo destacable por lo que los inversores más conservadores deberían esperar confirmación de cumplimiento de previsiones”.