El ataque a los 10.000 puntos se ha convertido en un ligero desplazamiento a lo largo de una sesión que ha ido claramente de más a menos. Los índices europeos abrían al alza al igual que el Ibex aunque se han ido desinflando a lo largo de la sesión; sobre todo el Ibex 35 que ha cerrado prácticamente plano, en una jornada aún marcadamente festiva.

El saldo de 2010 ha sido claramente negativo con recortes del 17,4% para la bolsa española, lastrada por el mal comportamiento, principalmente, de las grandes entidades financieras.

La crisis de deuda sigue estando en liza. Hoy en un artículo firmado por el vicepresidente chino, Li Keqiang, en el diario El País, se afirmaba que China seguiría comprando deuda española debido a su confianza en las medidas de ajuste.

Así las cosas las dos grandes entidades financieras del parqué, BBVA y Banco Santander han sumado medio punto porcentual;

Uno de los protagonistas de la jornada ha sido ACS que ha aumentado su participación en la eléctrica Iberdrola hasta un 20,2%. Por cierto que la eléctrica anunciaba la semana pasada un aumento en la participación de Gamesa hasta el 19%. La constructora ha sumado un 0,36% mientras que la empresa de renovables ha sumado hasta un 1,5%; peor suerte ha corrido la eléctrica ques e ha dejado al cierre un ligerísimo 0,1%.

El operador BME también ha sido hoy noticia al hacer público que negoció un volumen de algo más de 1,037 billones de euros en renta variable durante todo el ejercicio 2010, lo que supone un 16% más que en 2009. La empresa ha sumado hoy un 1,18%.

Entre las caídas más abultadas de la sesión destaca Enagas que se ha dejado un 1,64%; le siguen Gas Natural y Ebro Foods, con recortes del 1,23% y del 1,26% respectivamente.

Hoy además debutaba Amadeus como nuevo valor del selectivo español. La central de reservas ha tenido un primer día poco afortunado al haberse dejado un 2,1%.

En el mercado continuo las alzas más importantes han sido para Fluidra, Befesa y La Seda, mientras que los títulos de SOS Corporación, Grupo Távez y CAM han sido los más penalizados por los inversores.