El Fondo Monetario Internacional (FMI) avaló hoy la dura política de ajuste presupuestario del Gobierno británico pese a revisar a la baja, hasta el 1,5 %, su previsión de crecimiento para la economía del Reino Unido en el año 2011.

En su informe anual, el FMI consideró que no son necesarios cambios en el programa económico del Gobierno de coalición entre conservadores y liberaldemócratas, que tras su llegada al poder hace un año aprobó un profundo recorte del gasto para controlar el déficit, que está en el entorno de los 200.000 millones de euros.