La firma de inversión dirigida por Warren Buffet se plantea iniciar acciones legales contra David Sokol, ex directivo de la compañía que llegó incluso a ser considerado el máximo favorito en la sucesión del octogenario inversor al frente de la compañía, al considerar que el ejecutivo no cumplió con sus obligaciones de información y lealtad hacia la empresa al adquirir acciones de la compañía Lubrizol antes de proponerla como objetivo de inversión a la entidad.

El Comité de Auditoría de la firma ha determinado que Sokol "violó las normas de la compañía", incluyendo el código de conducta interno, en lo referido a información privilegiada.

"Sus engañosas e incompletas revelaciones a la cúpula directiva de Berkshire Hathaway respecto a esas compras violó la obligada franqueza hacia la compañía" y concluye que podría resultar apropiado emprender acciones legales para subsanar los posibles daños.