Tras el fuerte desplome que sufrían sus acciones este pasado lunes, cuando perdían más de un 11%, las previsiones para este miércoles no eran, nuevamente, muy halagüeñas para Almirall. Y es que hoy otras dos entidades se suman al recorte de sus estimaciones, tras los resultados trimestrales publicados hace dos días por biofarmacéutica, que han decepcionado a inversores y analistas.

En concreto, Deutsche Bank ha cambiado su consejo de "comprar" acciones de Almirall por el de "mantener" la inversión. El mayor tijeretazo se refleja en su valoración: los analistas pasan de los 18 euros por acción que le deban anteriormente a los 11 euros actuales, lo que supone un recorte cercano al 39%. Esta cifra deja a las acciones de Almirall sin potencial, teniendo en cuenta los 11,38 euros a los que cotiza en estos momentos.

Por su parte, Morgan Stanley ha aplicado un recorte algo inferior, en concreto, del 8,3% al otorgar a sus acciones un precio objetivo de 16,50 euros frente a los 18 de antes. A pesar de todo, mantiene un alto potencial alcista, del 45,50%.

A pesar de todo, los inversores han decidido poner un punto y aparte en la cotización de hoy. Si esta mañana las acciones de Almirall lideraban las caídas del Ibex 35, y tocaban los 10,97 intradía a las 11 de la mañana, perdiendo el soporte a medio plazo de los 11,1 euros, en estos momentos, cuando quedan cuatro horas para el cierre de la sesión, los títulos de Almirall se cuelan entre los tres más alcistas del Ibex 35 llegando a los 11,38 euros con subidas del 1,7%.

Resultados trimestrales

En sus resultados hasta septiembre, Almirall anunció pérdidas de 39,4 millones de euros frente a un beneficio de 57,1 millones conseguido en el mismo periodo de 2020.

El resultado neto normalizado de Almirall alcanzó los 61,4 millones de euros entre enero y septiembre, con un retroceso interanual del 17,2%, mientras que las ventas netas de su negocio 'core'  (que excluye la contribución de AstraZeneca) avanzaron un 6,2% en este periodo, hasta los 601,7 millones de euros.

La multinacional biofarmacéutica registró un resultado bruto de explotación (Ebitda) sin AstraZeneca de 164,2 millones de euros, un 20,3% más que en los nueve primeros meses del año pasado, en tanto que su flujo de caja operativo se situó a cierre de septiembre en 161,4 millones de euros.

La compañía ha achacado este resultado negativo al deterioro del valor contable del activo intangible de Seysara (69 millones de euros), a la cartera 'legacy' de Estados Unidos (22 millones de euros) y al pago por la opción de compra de Bioniz, finalmente no ejecutada (12 millones de euros).

Almirall mantiene la mejora de su objetivo de ventas para 2021, con un crecimiento de las ventas netas 'core' de un dígito medio, pero ha revisado al alza el rango bajo del 'core' Ebitda, aumentándolo a 200 millones de euros desde los 195 millones de euros de su previsión anterior. Así, espera que el Ebitda, excluyendo AstraZeneca, se sitúe este año entre los 200 y los 215 millones de euros.