A la vista de un gráfico semanal del Euro/Dólar podemos entender el motivo por el que, a día de hoy, seguimos posicionados por el lado largo (o alcista) en el euro. Si hacemos un poco de memoria recordarán que nos posicionamos al alza en el cruce justo cuando a finales de septiembre el subyacente saltaba por encima de la importante resistencia de los 1,3420 dejando un imponente hueco (gap) alcista en los 1,3290. Pues bien, nuestro stop loss para las posiciones alcistas, como no podría ser de otra manera, sigue estando en el mismo nivel.

Muchos de ustedes dirán que este nivel se perforó a la baja a principios de este mes cuando el euro se desplomaba tras la rebaja de tipos, por sorpresa, del Banco Central Europeo (BCE). Y lo cierto es que no. Están equivocados. En esa semana el cruce marcaba un mínimo en los 1,3294 pero lo importante es que el hueco, el gap alcista, no se cerró. Simplemente se rellenó. Para cerrar dicho hueco habríamos necesitado ver al cruce cerrar un viernes por debajo de los 1,3290 y finalmente cerró en los 1,3362. Por eso venimos recordando en las últimas semanas que nuestro stop loss no saltó y que por lo tanto seguimos largos en el cruce con un primer objetivo de subida en los máximos anuales (1,3832).

JM.R.