Barack Obama ha acusado al tea party, la facción más conservadora del Partido Republicano, de “desear la quiebra de Estados Unidos”, algo que pone en “grandes problemas” a la economía nacional.

“Creo que esta vez Washington debería preocuparse. Me exaspera la idea de que tenga que anunciar que 20 millones de personas se quedan sin prestación sanitaria para que aprueben la prórroga del presupuesto”, ha explicado el mandatario en una entrevista con CNBC.

En su opinión, “si caemos en el hábito de que un partido esté autorizado a extorsionar, entonces ningún presidente que venga tras de mí será capaz de gobernar de manera efectiva”.

C.P.O.