El impuesto que el Gobierno planeaba aplicar sobre las energéticas se recortará a la mitad, hasta los 2.000 millones de euros en dos años, tras acordarse en su tramite parlamentario suavizarse con la aprobación de dos enmiendas del PNV y PDeCAT para que se excluya del importe neto de la cifra de negocio el correspondiente a las actividades reguladas y que el impuesto se aplique solo a la actividad que las empresas desarrollen en España, según estimaciones de analistas.
Analistas de Bankinter consideran que con las nuevas modificaciones el sector eléctrico se ve más beneficiado que las petroleras y gasistas. Así, dentro de las eléctricas, estiman que la más beneficiada sería Endesa que, de un impacto inicial de cerca de 800 millones en los dos ejercicios por el impuesto, podría verse reducido a algo menos de la mitad. En el caso de Iberdrola, Bankinter señala que la reducción podría ser similar, aunque su impacto en la capitalización bursátil sería menor para el grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán.
Dentro de las eléctricas, Redeia (REE) tiene potencial de recuperación en el corto plazo, según explica Ramón Bermejo, estratega de mercados. En la sesión del jueves mostraba un patrón envolvente. Mientras no pierda 16,99 euros, no hay ninguna señal bajista. Por el lado superior, si rompe por encima de los 17,505 euros invalidaría la figura, lo que es una señal alcista.
Desde ahí, puede continuar la recuperación hacia el lado superior del canal, lo que sería subir más de un 7% desde los precios de apertura del viernes.
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