Hoy, 28 de noviembre, se celebra el Día de la Dermatitis Atópica, una enfermedad inflamatoria de la piel cuya prevalencia se ha triplicado en las tres últimas décadas en los países industrializados afectando hasta al 30% de los menores y al 10% de los adultos. En la actualidad, en España, de cada 10 niños que nacen, entre dos y tres desarrollan esta enfermedad, en cuyo origen según las últimas investigaciones científicas influiría una alteración en la estructura de la piel y por tanto en su función protectora, que provocaría que el menor no esté protegido frente a agentes externos.

                                                      

“La dermatitis atópica se está haciendo famosa, no por las campañas de sensibilización sino por su gran prevalencia”, afirma la presidenta de la Asociación de Pacientes y Familiares con Dermatitis Atópica (ADEA), Mercedes G. Labrador. “Por simple estadística, hoy por hoy, es muy poco probable que en una clase no haya ningún niño con esta enfermedad. Desde ADEA queremos quitar el miedo a los padres, resolverles sus dudas y tranquilizarles sobre esta enfermedad benigna pero altamente molesta y sobre la que, hasta día de hoy, no hay cura”.

 

Por ello, con motivo de la celebración del Día de la Dermatitis Atópica, ADEA quiere despertar la mayor sensibilidad social y sanitaria posible sobre esta enfermedad y llamar la atención sobre las implicaciones que conlleva en la vida diaria de los pacientes y sus familiares. Para ello, ha organizado esta tarde un coloquio entre pacientes y familiares y especialistas de referencia en dermatología pediátrica en nuestro país:el Dr. Antonio Torrelo, jefe del Servicio de Dermatología del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús (Madrid) y el Dr. Raúl de Lucas, jefe de Sección de Dermatología Pediátrica del Hospital Univesitario La Paz (Madrid).

 

El objetivo de la conferencia es tanto facilitar la información sobre las últimas novedades científicas y terapéuticas como promover la formación de los pacientes y sus cuidadores. En este sentido, se estrenará el documental “Familias Atópicas”, protagonizado por tres familias con menores atópicos, y se presentará la aplicación informática (app) para teléfonos inteligentes y dispositivos móviles “Alex, ¡no te rasques!” dirigido especialmente a que los niños puedan entender su enfermedad de una manera sencilla, divertida e interactiva.

 

Una barrera cutánea que no protege

La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria de la piel, cuyos síntomas más frecuentes son una piel muy seca y sensible en la que aparecen lesiones caracterizadas por la hinchazón, el enrojecimiento y, sobre todo, un picor intenso.

 

En el 45% de los casos, la dermatitis atópica aparece antes de los seis meses de vida, en el 60% aparece antes del año de vida y en el 85% antes de los cinco años. Aunque se estima que en el 70% de los casos desaparece en la adolescencia, evolucionando a formas severas de la enfermedad en aquellos pacientes que lleguen a la etapa adulta con dermatitis atópica.

 

Está demostrado que existe una predisposición genética a padecer dermatitis atópica, ya que si uno de los padres sufre dermatitis atópica, el menor tiene alto riesgo de padecerla. También se sabe que uno de los factores desencadenantes de la enfermedad es la presencia de una alteración inmunológica en el paciente, que provoca una inflamación subclínica persistente en  la piel.

 

Ahora, además, entre las posibles causas de esta enfermedad se ha constatado la coexistencia de trastornos en la función de barrera de la piel. “Los últimos descubrimientos nos indican que, en la dermatitis atópica, hay alteraciones en la formación de la estructura de la barrera cutánea. Con lo cual, la piel de estos pacientes es más seca, porque se pierde agua a través de la piel alterada y además los irritantes y los alérgenos pueden traspasar la epidermis y provocar la inflamación”, explica el Dr. Raúl de Lucas, jefe de Sección de Dermatología Pediátrica en el Hospital Universitario de La Paz.

 

Así, agentes infecciosos como el estafilococo, irritantes como el polvo o el sudor, o elementos químicos como el níquel o el cromo, son sustancias capaces de atravesar la barrera cutánea y sensibilizar las células del sistema inmunológico. “Los pacientes con dermatitis atópica tienen más probabilidad de contraer infecciones en general, tanto bacterianas como víricas o de otro tipo. La alteración de la barrera cutánea también altera la inmunidad innata que es la que nos defiende especialmente del exterior, sobre todo mientras se desarrolla el sistema de inmunidad adquirida en los menores”, asevera el Dr. De Lucas, quien impartirá la ponencia “Barrera cutánea y defensa antimicrobiana, ¿cuál es su relación en la Marcha Atópica?” en la conferencia de hoy a pacientes, cuidadores y familiares.

 

Los nuevos conocimientos sobre la genética y fisiopatología de la piel han permitido conocer también que la epidermis –la capa más externa de la piel- puede ser la puerta de entrada a otros alérgenos que propicien el desarrollo de otras enfermedades alérgicas, en lo que se conoce como la Marcha atópica o Marcha alérgica.  Un estado en el que van apareciendo una tras otra varias enfermedades alérgicas, siendo la primera la dermatitis atópica, y desarrollándose después el asma y la rinoconjuntivitis, así como la alergia a ciertos a alimentos.

 

“Posiblemente, si somos capaces de tratar a los pacientes con dermatitis atópica, de restaurar la barrera cutánea de alguna manera, de aumentar la resistencia de la epidermis, vamos a ser capaces de prevenir en última instancia la mayoría de las manifestaciones de la marcha atópica”, concluye el jefe de Sección de Dermatología Pediátrica en el Hospital Universitario de La Paz. Los expertos estiman que alrededor del 30% de los menores con dermatitis atópica desarrollará una o varias de estas enfermedades alérgicas.

 

Repercusión en el niño, repercusión en la familia

Los síntomas de la dermatitis atópica se presentan en brotes, combinando épocas de mejoría con épocas de crisis. La duración en los menores de cada brote ronda los 18 días y suelen tener de media cinco brotes al año. Estos periodos de crisis producen en los menores una alteración del sueño, provocando que no puedan descansar y generándoles irritación y ansiedad ante su situación. 

 

Por tanto, es una enfermedad que produce un alto impacto en la calidad de vida del niño, tanto en su autoestima, la productividad en los estudios, actividades rutinarias y de ocio, etc… De hecho, el impacto de la dermatitis atópica en su calidad de vida es similar al de otras enfermedades crónicas que se perciben generalmente como más debilitantes, tales como enfermedad renal, asma o diabetes.

 

A su vez, el cuidado del niño conlleva un aumento de la carga familiar dada la necesidad de una mayor atención frente al menor enfermo, por el gasto económico importante que conlleva tratar la enfermedad, como los cambios de adaptación en la vida de la familia. Una realidad que se expone en el documental “Familias Atópicas”, que cuenta con la colaboración de ADEA, de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP) y Leti Laboratorios, y que se estrena hoy con motivo del Día de la Dermatitis Atópica.

 

Educación más tratamiento

El manejo adecuado de la enfermedad comienza por evitar los desencadenantes de la enfermedad más una higiene e hidratación diaria de la piel mediante la aplicación una o varias veces al día de una crema emoliente (hidratante). Para el tratamiento de los brotes se utilizan antiinflamatorios tópicos. En los casos graves, también se emplean la luz ultravioleta y los inmunosupresores por vía oral. Además, existen tratamientos para controlar a largo plazo la enfermedad, reduciendo significativamente el número de brotes, retrasando su aparición y acortando la duración de los mismos, gracias a mantener controlada la inflamación subclínica que persiste más allá de la desaparición de las lesiones.

 

“Los padres y también los pacientes tienen que ser conscientes de que hay que cuidarse cuando hay brotes, pero también entre brotes. Hay que cuidarse a diario”, añade la presidenta de ADEA, “y también seguir las recomendaciones del dermatólogo, confiar en ellos, para lograr tener una dermatitis controlada”, explica Mercedes G. Labrador,  quien muestra su preocupación ante el efecto que la crisis pueda tener especialmente en la necesidad de emolientes por parte de los pacientes, no cubiertos por la seguridad social, pero necesarios y de uso diario.

 

Otro pilar fundamental en el tratamiento de la dermatitis atópica es la intervención educativa en todas las personas involucradas con el paciente atópico. El Dr. de Lucas explica al respecto que “hoy en día la información es muy fácil de obtener. Es diferente la información de la educación. El paciente tiene que conocer su enfermedad, conocer el brote, para que puedan ser autónomos y puedan no depender de estar recurriendo constantemente al médico”.

 

En este sentido, y para los más pequeños se ha desarrollado de una nueva aplicación informática para que el niño se familiarice y aprenda sobre la dermatitis atópica de una manera divertida: “Alex, ¡no te rasques!”. Alex, un niño con dermatitis atópica, cuenta con la ayuda de Glupi, una célula que le lleva a conocer el interior de su piel y le acompaña en el día a día proporcionándole recomendaciones y cuidados a seguir. Gracias a esta herramienta para teléfonos inteligentes y dispositivos móviles, con el patrocinio de Astellas Pharma, el menor puede resolver puzzles relacionadas con situaciones que le podrán ocurrir en el día a día, higiene diaria, en la playa, etc. Además, podrá ver diferentes vídeos, en los que se explican diferentes situaciones que vive el niño. Y, por último, incluye un calendario para que los padres puedan recordar cuándo ha de aplicarse los emolientes a los menores.

 

Charla-coloquio con pacientes

Hoy jueves 28 de noviembre, a las 18.00 h., y con motivo del Día de la Dermatitis Atópica, tendrá lugar una charla-coloquio abierta a pacientes en la Sala Rosales I del Hotel Husa Princesa (C/ Princesa nº 40). La presidenta de ADEA abrirá la conferencia, que continuará con la intervención del Dr. Antonio Torrelo con la ponencia “Prevención y tratamiento de la dermatitis atópica” y del Dr. Raúl de Lucas con la ponencia “Barrera Cutánea y Defensa Antimicrobiana, ¿cuál es su relación en la Marcha Atópica?”. Además, se proyectará el documental “Familias Atópicas”, que se estrena hoy y que puede verse también este jueves 28 de noviembre en La 2 de TVE, en el programa “Aventura del Saber”.