La producción de acero en los siete primeros meses del año alcanzó los 7,65 millones de toneladas, un 36% menos que en el mismo periodo del año anterior, y coincidió con una caída del 49% en el consumo aparente, hasta 905.000 toneladas, anunció hoy la Unión de Empresas Siderúrgicas (Unesid). El mayor descenso de producción correspondió a los aceros inoxidables, del 49%, hasta 678.000 toneladas, mientras que la contracción en los aceros no aleados fue del 34%, hasta 7,15 millones de toneladas.