En la tradicional rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno del BCE, que votó unánimente a favor de mantener los tipos en el 1%, el máximo responsable de política monetaria de la eurozona volvió a utilizar el término "apropiado" al referirse al precio del dinero en la zona euro, lo que apunta a que la institución emisora no se plantea modificar su actual política monetaria, en consonancia con el Banco de Inglaterra y la Reserva Federal de EEUU, y en contraste con la decisión de su homólogo australiano, que ha elevado los tipos por tercera vez consecutiva al observar una mejora de la economía mayor de lo previsto.


Sin embargo, el banquero francés reconoció que las decisiones referidas a la retirada gradual de las medidas no convencionales adoptadas por la entidad para suministrar liquidez al eurosistema fueron decididas por "consenso".


En concreto, Trichet confirmó que la próxima subasta de liquidez a 12 meses, prevista para el 16 de diciembre, será la última de este tipo, y además apuntó que el tipo de adjudicación de esta operación se indexará al tipo medio mínimo ofertado en las operaciones principales de refinanciación de la institución durante doce meses, aunque puntualizó que este cambio en el tipo de adjudicación "no supone una orientación sobre los tipos de interés".

"La mejora en las condiciones del mercado financiero indican que no todas nuestras medidas de liquidez son necesarias en la misma medida que en el pasado", afirmó Trichet, quien subrayó la necesidad de un equilibrio en las decisiones sobre la retirada de estímulos del BCE, pues "existen riesgos si se actúa demasiado pronto y si se actúa demasiado tarde".

REVISA AL ALZA PREVISIONES DE CRECIMIENTO EN 2010.

Por otro lado, los economistas del BCE pronostican que la economía de la eurozona se contraerá entre un 4,1% y un 3,9% este año, mientras revisaron al alza sus pronósticos para 2010, hasta una horquilla de entre el 0,1% y el 1,5% y de entre el 0,2% y el 2,2% para 2011.

En lo que respecta a los precios, las proyecciones del BCE prevén una tasa de inflación del 0,3% en 2009 y de entre el 0,9% y el 1,7% en 2010, mientras que para 2011 apuntan a un rango de entre el 0,8% y el 2%.

A este respecto, Trichet apuntó que las expectativas de inflación a medio y largo plazo se mantienen "firmemente ancladas" en línea con el objetivo de la institución.