A continuación se incluyen los elementos principales del plan:
.- Creación del Fondo de Inversión Público-Privada, que comprará la deuda de mala calidad de los bancos con dinero del Gobierno y de inversores.
Inicialmente adquirirá títulos por valor de 500.000 millones de dólares y la cartera eventualmente podría llegar a 1 billón.
.- Nuevas inyecciones de capital en los bancos, que se gestionarán a través de una nueva entidad, el Fondo de Estabilidad Financiera. El programa incorpora restricciones para los bancos que reciban el dinero público:
-La obligación de informar de cómo la ayuda les ayudará a mantener o aumentar el crédito.
- La obligación de restringir los dividendos y adquisiciones.
- La obligación de limitar la compensación de sus altos ejecutivos a medio millón de dólares por año.
.- Todos los bancos grandes deberán someterse a una "prueba de estrés", que evaluará si son capaces de seguir prestando y resistir si se agrava la crisis.
.- Ampliación de un programa de la Reserva Federal que actualmente financia la compra de préstamos automovilísticos, estudiantiles y de tarjetas de crédito para dar liquidez a los mercados de crédito de forma directa, sin pasar por los bancos privados.
- El programa inicialmente iba a dar financiación por valor de 200.000 millones de dólares para esos fines, pero ahora podrá expandirse a 1 billón de dólares.
- La Reserva Federal comprará además créditos hipotecarios de propiedades comerciales.
- El departamento del Tesoro aportará 100.000 millones de dólares al programa.
.- Uso de 50.000 de dólares para ayudar a propietarios de viviendas a evitar el embargo, con lo que el Gobierno pretende poner freno a la ola de desahucios, que deprimen los valores inmobiliarios. Los detalles de esta parte del plan serán divulgados en las próximas semanas.

