El "Fear & Greed Index" elaborado por la CNN lleva marcando lecturas extremadamente negativas desde el 10 de marzo.

Si nos fijamos en el gráfico que recogemos seguidamente, estas lecturas de extremo miedo se corresponden con  los mínimos de 2018.

CNN indice de miedo

En cuanto a los gestores de fondos, están desconcertados.

Al producirse simultaneamente la caída de las bolsas, de los bonos y del oro, no encuentran un lugar seguro donde colocar el dinero, y optan por la liquidez.  Están vendiendo desde acciones hasta bonos y oro para obtener liquidez.

Los gestores de fondos de "paridad-riesgo" están perdiendo por la caída simultanea de las bolsas y de los bonos.Los bonos ya no pueden amortiguar las pérdidas de la cartera de acciones.

Los gestores de fondos que siguen la tendencia, son vendedores claros.

La cotización de los bonos se ha girado a la baja por dos motivos: todo el mundo dirigió su dinero a los bonos estadounidenses como refugio seguro y porque el paquete de estimulo fiscal de 1 billón de dólares supondrá un fuerte incremento de la oferta de bonos.

En este sentido es preciso tener en cuenta que ese paquete de estímulo fiscal probablemente será de mayor importe, con lo que probablemente nos enfrentaremos a un tsunami de deuda pública.

Un incremento de la rentabilidad de los bonos indudablemente provocará un incremento de los pagos por intereses, lo que aumentará más la presión sobre las cuentas públicas.

El oro ha caído porque los gestores de fondos han deshecho posiciones para obtener liquidez y así hacer frente a las garantías adicionales exigidas por los "brokers". Y lógicamente por las expectativas de unos tipos de interés más altos.

El gran problema del sistema financiero financiero un mundial es una falta de dólares, especialmente del sector financiero europeo, donde las entidades financieras están cortas de dólares. Se estima que el mundo necesitaría 12 billones de dólares. ¡¡Una barbaridad!!

Si a esta inyección de liquidez le añadimos la compra de deuda publica por parte del FED para que Trump pueda gasta más de 1 billón de dólares, el escenario al que nos enfrentamos sería, como mínimo, estancamiento con inflación.

Si nos fijamos en el gráfico del S&P 500, la tendencia de corto plazo sigue siendo bajista. Y, por el momento, no debemos abrir posiciones largas porque la tendencia dominante a corto plazo sigue siendo bajista.

Ahora bien, eso no es óbice para que crea que podemos estar en una oportunidad de compra excepcional como sucedióo en 1974, 1982, 1987 y 2008.

En este sentido es preciso tener en cuenta que la tendencia de largo plazo sigue siendo alcista. Y en estos momentos de pánico extremo es cuando debemos tener muy en cuenta la Teoría de la Opinión Contraria.

En este tiempo de espera hasta la formación de un suelo, ¿qué valores debemos elegir?

Es el momento de recurrir a los fundamentales para elegir empresas con balances sólidos, con bajo nivelesde endeudamiento, flujos de efectivo estables y que tengan un rendimiento de dividendos adecuado para los tipos de interés existentes.

¿Cuándo comprar?

Ahí nos puede ayudarel análisis técnico.

Necesitamos que tengamos pruebas de la formación de un suelo. Por el momento, no las tenemos.

¿Qué necesitaríamos para considerar que se habría formado un suelo?

La superación de una resistencia significativa. Si nos fijamos en el S&P 500, vamos a tomar como referencia las rectas directriz bajista.

Veamos el gráfico horario del S&P 500 que recogemos a continuación.

La superación del 2.700 sería el primer aviso fiable de la formación de un suelo.

¿Hasta qué nivel podría subir el S&P 500 desde ahora hasta comienzos de 2021?

En primer lugar debemos tener en cuenta la celebración de las elecciones presidenciales en los EEUU en el próximo mes de noviembre.

Es indudable que Trump hará todo lo posible para que suba la bolsa.

Por lo tanto, si e S&P 500 superase el 2.700, lo más probable es que se dirigiera a la zona de los 3.200 para 2021.

 

Gráfico horario del S&P 500 Contado