¿Qué balance hace del 2021 en los mercados de Renta Fija?
El balance es muy positivo, en un año complejo como fue 2021 los mercados de renta fija han continuado avanzando con normalidad, han continuado siendo una fuente de financiación recurrente tanto para las administraciones públicas como para el sector privado Si tuviera que destacar aspectos más relevantes: crecimiento del mercado regulado AIAF que ha subido un 4% con casi 40.000 millones de euros de crecimiento en emisiones de bonos. También se ha visto una recuperación de las emisiones de titulización con formato estandarizado, transparente y siguiendo la pautas del BCE; en tercer lugar está la subida del mercado MARF por el que han puesto más de 100 compañías y donde los saldos han crecido más del 50% y por último está el crecimiento de la financiación sostenible y el desarrollo que está teniendo todo este mercado. 

¿Cómo ha ido el año en cuanto a la emisión de bonos con criterios ESG y cómo van a seguir evolucionando este tipo de activos?
Ha sido un año récord de cifras absolutas máximas donde hemos visto crecimiento relevante en las emisiones sostenibles. En el conjunto de los mercados de renta fija que gestionamos en BME hemos admitido un total de 12.260 millones de euros en emisiones etiquetadas como ESG, verdes, sostenibles o sociales y en los hechos destacados de 2021 uno de los más relevantes ha sido la primera emisión de bonos verdes del Tesoro por  5000 millones de euros que ha tenido una sobredemanda de en torno a 12 veces, que es una cifra muy superior a la que hay en renta fija y demuestra el apetito de los inversores por ese tipo de productos y el éxito que tuvo . También en el ámbito de las administraciones públicas han ido viendo a las Comunidades Autónomas emitiendo bonos sostenibles con sus programas de emisión, en algunos casos incorporando la emisión de bonos verdes y por último, destacaría en el mundo de lo social la admisión a cotización en el mercado AIAF de octavo bono social del ICO,  pues para nosotros siempre es una gran satisfacción poder colaborar con el ICO. 

El MARF ha seguido creciendo. ¿Qué fue lo más destacado en este mercado?
MARF ha tenido un año excepcional. Después de 2020 donde vimos cierta ralentización de la tendencia al alza que venía registrando en este mercado desde sus inicios en 2013, 2021 ha demostrado una fortaleza muy importante. El número total de compañías que han debutado en el mercado son 23, ya son 116 las compañías admitidas a cotización, y el saldo vivo roza los 10.000 millones de euros , con un crecimiento del 45% con respecto a las cifras de cierre de 2020. Pero lo más destacable  fue llegar en abril a los 100 emisores que nos dio la excusa para hacer un trabajo de análisis con la Universidad de Sevilla en la que destacó  la gran flexibilidad que tiene este mercado para las compañías, algo que se pone de manifiesto en el gran número de compañías que forman parte del mercado de distintos sectores económicos, localizaciones geográficas diferentes, tamaño, antigüedad… pero lo más relevante de este trabajo fue ver cómo las compañías que cotizan en este mercado tienen ingresos totales alrededor de 80.000 millones de euros, producen una rentas de 20.000 millones de euros y dan empleo a casi 400.000 personas. 

En las últimas semanas estamos viendo un entorno de subidas de rentabilidades en los bonos de referencia europeos, ¿cómo afecta este escenario a los inversores y qué podemos prever para 2022?.
 
La situación de los tipos de interés está condicionada por las políticas monetarias de los BC. Los últimos años ha estado condicionada por las políticas expansivas y este año tendremos que estar más pendientes de la retirada de estos estímulos, tapering o retirada de estímulos. Esto estará condicionado por la situación que presenta la economía, los posibles riesgos inflacionistas que haya en el mercado, la situación geopolítica entre Ucrania y Rusia y por las posibles decisiones que tomen los BCE en relación a los tipos de interés. La situación de los tipos en estos meses ha ido cambiando.  Desde los mínimos en enero  de 2021, mínimos históricos con los tipos a diez años al 0% en España y la mayoría de tipos de referencias en entorno negativo, hemos visto una progresiva subida de tipos que han hecho que los inversores hayan ido adecuando las carteras a este nuevo escenario de tipos con reducciones de la duración en sus carrtera, buscando instrumentos ligados a la inflación o con una parte variable y también la entrada en productos a vencimiento.