Estos sesgos cognitivos se producen como respuesta natural a una situación, una situación en la que no se sigue una buena toma de decisiones. Por eso, para tener éxito en algo, los expertos creen en una estrategia que tiene un 80% de psicología y un 20% de metodología. Por muy bueno que sea un método, si la persona no controla sus sesgos psicológicos, es poco probable que triunfe.
Terror a las Pérdidas en el Trading
La aversión a las pérdidas es la primera y más común enfermedad entre los traders. Nos referimos a la incapacidad de aceptar la derrota. Cuando el trader usa stop loss, o alcanza la cantidad máxima que se permite perder, se dirá a sí mismo que es hora de abandonar la operación.
Sin embargo, en la práctica, el trader optará por mantener (hold). Cree que mientras no venda, no perderá. El trader se niega a reconocer su error. Por eso no podrá continuar con el sistema de trading mecánico.
La mayoría de traders creen que si aguantan el tiempo suficiente, la situación cambiará y las perdidas se convertirán en ganancias. Por eso la mayoría fracasan. La aversión a las pérdidas es un rasgo humano innato, pero también es la razón por la que los traders fracasan.
Si no aprendes a gestionar tus sesgos psicológicos, esto sucederá una y otra vez hasta que abandones el trading. El trader es un ejemplo, pero el concepto es el mismo para el inversor. Si está buscando asesores profesionales de criptodivisas, puede utilizar plataformas de trading como:
Kraken.com/es-es
Kucoin.com/es
Immediate-edge.io/es/
Que seguramente reducirán las posibilidades de que su viaje de trading de criptodivisas fracase desde el principio.
¿Qué es el efecto del coste hundido?
La siguiente es el Efecto de los Costes Hundidos. Algo común para todo el mundo, no sólo para inversores y traders. Como ya has gastado dinero, el efecto del coste hundido te anima a seguir adelante y hacer algo en contra de tu voluntad.
Por eso, algunos ven películas aunque no quieran verlas, comen alimentos aunque tengan un sabor horrible y esconden su ropa aunque no se la pongan. Y aunque su inversión ya esté perdiendo dinero, tienden a mantenerla porque se arrepienten de haberla hecho.
Es algo típico de los humanos. Sin embargo, estas acciones son perjudiciales para los inversores y traders. Supongamos que compras una moneda con la expectativa de que aumente su valor. Con esta moneda, has ganado mucho dinero.
Sin embargo, a diferencia de otras monedas, el valor de tu moneda sigue siendo bajo después de unos meses o años. Te quedas ahí y mantienes la moneda que has comprado en lugar de cortar tus pérdidas y comprar otras monedas para obtener beneficios. No porque tengas confianza, sino porque ya has gastado dinero por ella.
El sesgo de resultado es una decisión basada únicamente en el resultado de algo. Y tendemos a no darnos cuenta de cómo ocurrió y se hizo.
Por ejemplo, tu amigo invierte en una moneda desconocida y obtiene un 200% de beneficio. Y con tu emoción, lo único que ves es el resultado, el beneficio. Por tanto, tú también inviertes sin saber qué tipo de moneda es, de dónde procede y su finalidad. La base de tu decisión es el resultado o el beneficio.
Muchas personas son estafadas debido a este comportamiento. Cuando alguien muestra pruebas de los ingresos de otros inversores, no pueden controlar sus emociones y toman decisiones basadas en el resultado que les ha ocurrido a otros.
Cómo el sesgo puede afectar tus operaciones
Uno de los problemas en la mentalidad de los traders es el sesgo de recencia. Esto es, según Investopedia, la tendencia a dar importancia a los acontecimientos más recientes. Esto perjudica al trader. Por ejemplo, la operación que ocurrió ayer tiene un efecto más fuerte que las operaciones de la semana pasada.
Digamos que pierdes durante tres días seguidos. Pero antes de que esto ocurriera, ganaste durante casi dos semanas seguidas. Tres días de derrotas recientes han tenido un efecto más fuerte en ti que tus victorias anteriores. Esto te hará dudar de la estrategia y el sistema que estás utilizando. Tendrás miedo de volver a operar con tu sistema, incluso si crees que la operación ganadora está clara.
Podemos invertir las circunstancias, digamos que ganas tres días seguidos. Ahora tendrás una actitud optimista en el mercado, te sentirás como el mejor trader del mundo. También olvidarás tus pérdidas recientes. Es probable que te sientas eufórico, y esto te llevará a tomar malas decisiones, como entrar en una operación que no se ajusta a tu estrategia.
El efecto de anclaje es la tendencia de un individuo a tomar una decisión basándose en su percepción inicial de algo incierto. Esta situación se da a menudo en nuestra vida cotidiana. Utilicemos como ejemplo el descuento de un producto.
Imagina un producto que se vende a 100 euros, y otro tiene un precio original de 150 euros pero con un descuento que rebaja el precio a 100 euros.
Por lo general, las personas basan su selección en el precio de compra y optan por el más barato. Lo mismo ocurre en el aspecto financiero. Un activo se compra en función del valor de su precio anterior.
Por eso les cuesta venderlo. Es porque el precio sigue siendo más bajo en comparación con los precios anteriores. Han olvidado cómo usar la lógica. Como resultado, harán una mala inversión al retener un activo durante mucho tiempo. Y se pueden ignorar otras inversiones interesantes por mantener la inversión sobrevalorada durante demasiado tiempo. Por eso les resulta difícil venderla, aunque el precio siga siendo más bajo que antes.
Conclusiones
Los sesgos cognitivos que hemos mencionado son algo que no podemos eliminar de nuestro sistema. Sólo debemos ser conscientes de ellos para operar de forma inteligente. Algunos traders no pueden luchar contra estos sesgos, y buscan la ayuda de profesionales.
