Vivo tendrá que extender su cobertura telefónica a 35 municipios que no tienen servicio, dieciséis de ellos hasta el próximo marzo y los 19 restantes hasta diciembre de 2011, según un comunicado difundido por la Anatel. La compañía deberá ofrecer también cobertura de la tecnología de tercera generación (3G) hasta diciembre de 2012 en el área urbana de 83 municipios además de los 2.832 que ya contemplaba su plan de ampliación de servicios anunciado el pasado julio.
La tercera condición es la cesión de su red de fibra óptica a la red de educación pública para la conexión de las universidades públicas en el estado de Sao Paulo, donde tiene su sede la compañía. El cumplimiento de estas condiciones es obligatorio y, si no se hace, la Anatel puede aplicar multas o incluso, determinar la anulación de la compra de Vivo por parte de Telefónica.
De forma paralela a este negocio, Portugal Telecom anunció una asociación estratégica con la compañía brasileña Oi, de la que compró el 22,38%, para mantener su presencia en el mercado del país suramericano.

