Las entidades bancarias y de seguros españolas invirtieron 1.070 millones de euros en acciones de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) durante 2020, lo que supone casi triplicar el importe del año anterior, según se desprende de la VIII edición del Informe Seres-Deloitte, que mide el progreso de la contribución de la RSE de las empresas españolas.

El estudio analiza el impacto y la contribución real de las empresas a la sociedad a través de un modelo basado en cinco ejes (económico, organizacional, relacional, social y personal). De las 71 compañías participantes, pertenecen al sector financiero Banco Santander, Banco Sabadell, CaixaBank, BBVA, ING, Citi, Fundación Ibercaja, Mapfre, Mutua Madrileña, Caser, Mutualidad de la Abogacía, DKV y Santalucía Seguros.

Las empresas financieras destacan frente al resto de sectores por presentar los datos más elevados en casi todos los parámetros, siendo las entidades con mayor volumen de inversión total en RSE, mayor número de proyectos de RSE y mayor volumen de empleados involucrados en voluntariado corporativo y en programas de RSE.

El volumen de inversión en responsabilidad social empresarial del sector financiero ascendió a 1.069,9 millones de euros, lo que representa el 72% de la inversión total realizada por las empresas recogidas en el informe en 2020. En la edición de 2019, el sector financiero representaba el 26% de la inversión, con 371 millones de euros.

El informe revela que las empresas duplicaron los proyectos llevados a cabo, en un esfuerzo por atender a los problemas de la sociedad. El sector financiero aglutinó el 63% de los proyectos en 2020, con un total de 15.727, el cuádruple que el año anterior, cuando realizó 3.715 que representaban el 29% del total.

Además, unos 51.000 trabajadores del sector de las finanzas participaron activamente en los programas de RSE llevados a cabo, lo que representa un 28% de los trabajadores involucrados de todas las empresas recogidas en el informe.

En cuanto a la distribución de los beneficiarios de los proyectos, destaca el papel de las empresas financieras, con más de 47 millones de personas (+62%) que representan al 30% del total de beneficiarios.

El informe de Deloitte y Fundación Seres señala que en el sector financiero toma importancia el desarrollo de proyectos de integración laboral, la evaluación y comunicación del impacto de la contribución de la empresa y que cuentan con un informe anual de información no financiera.

Asimismo, destaca que todas las empresas del sector financiero recogidas en el informe cuentan con una estrategia de RSE alineada a la de su negocio, un código ético o de conducta, contemplan la RSE como una palanca de innovación e involucran a sus empleados en sus actuaciones, por ejemplo, recogiendo su opinión y propuestas o solicitando su colaboración o participación en actuaciones de responsabilidad social empresarial.