"La severidad de la actual crisis financiera simplemente pone en relieve la impotencia del G8, cuya influencia en los mercados ha disminuido del mismo modo que la de sus ministros de Economía", señala el diario británico, que añade que "cualquier discusión sobre tipos de interés, donde los gobiernos y bancos centrales todavía pueden ser efectivos, está condenada al fracaso mientras China siga sin ser incluida como miembro".De la misma opinión es The Economist, que reclama el reconocimiento de los cambios acontecidos en la economía mundial, en la que actualmente los países emergentes son responsables de más del 50% del crecimiento mundial, y sus principales representantes como India o China necesitan contar con mayor voz en los foros internacionales, como el FMI, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas o el propio G8.De este modo, Financial Times y The Economist sugieren la ampliación del actual G8, creado hace 30 años y actualmente formado por Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Rusia, Reino Unido, y EEUU, a los que se suma el presidente de la Comisión Europea, mediante la inclusión de China, Brasil, India y España, puesto que así se representaría a más del 70% del PIB mundial.Asimismo, ambas publicaciones coinciden en defender la opción de una ampliación del grupo en lugar de la posibilidad de reducirlo a las cuatro superpotencias económicas (EEUU, China, Japón y la UE), puesto que, según The Economist, "no es probable que Italia o Rusia estén dispuestos a dejar sus asientos en la mesa principal".