Lo llamativo de la emisión es que BBVA ha decidido salir al mercado sin aval estatal porque, según comentan fuentes cercanas a la operación, se prefería salir a un plazo más largo, de cinco años, “cuando con garantía te limitan a sólo tres”. No obstante, el banco tiene además 10.300 millones de euros en avales, por lo que se espera que también sea uno de los emisores españoles más activos en los próximos meses por esta vía, informa Expansión. Aunque la entidad ha declarado que cuenta con una holgada posición de liquidez, con más de 50.000 millones en activos con los que podría obtener liquidez en las subastas del BCE si lo viera necesario, fuentes de un banco colocador apuntan que, una firma del tamaño de BBVA, n
ecesita algo más que los avales para satisfacer sus necesidades. Además, ha renunciado a realizar ampliaciones de capital, como sus colegas europeos o el propio Santander y, a cambio, captó 1.000 millones de euros recientemente mediante una emisión de participaciones preferentes, que colocó a través de la red.

Desde que estalló la crisis en verano de 2007 no se habían registrado emisiones a cinco años

Con esta operación de deuda, sigue los pasos de otros competidores europeos, que también han podido acceder al mercado mayorista sin necesidad de la ayuda de sus respectivos gobiernos. En los últimos días, BNP Paribas, HSBC o UniCredit han colocado 4.000 millones de euros a plazos similares que BBVA. Todos ellos comparten características comunes: son bancos de gran tamaño y elevado ráting. En este sentido, BBVA ha sido una de las pocas entidades en Europa que han mejorado el ráting desde el inicio de la crisis. El 13 de febrero de 2008, S&P se lo elevó desde AA- a AA, tan sólo dos escalones por debajo de la máxima calificación AAA con la que cuenta el Tesoro español, destacando su “una evolución más sólida que la de sus competidores europeos”.

El precio que se baraja

Por otro lado, se espera que el precio al que coloque la emisión se aproxime a lo que tendría que pagar con aval estatal. Se barajan en el mercado en torno a 180 puntos básicos sobre el índice midswap (referencia para las emisiones a tipo fijo que se aproxima al euribor 3 meses), “por lo que se encuentra en niveles similares a los 155 ó 160 puntos básicos que debería pagar por una emisión con aval a ese plazo”, añaden las mismas fuentes. Se trata de unos costes atractivos en relación a las operaciones de sus competidores europeos y existe cierto consenso en el mercado de que ayudará a que otros emisores españoles salgan al mercado sea o no con aval. La primera emisión con garantía se espera para finales de la semana que viene.

La entidad tiene además 10.300 millones de euros en avales públicos para salir al mercado

Entre abril y junio del año pasado, varios bancas y cajas consiguieron financiarse en el mercado mayorista de financiación a costes más baratos, aunque lo hicieron a plazos más cortos, de un máximo de tres años. En total colocaron más de 20.000 millones de euros entre cédulas y deuda senior. Sin embargo, con la quiebra del estadounidense Lehman Brothers de mediados de septiembre empeoró la situación y los mercados cerraron sus puertas a cal y canto.