El índice DOW JONES sube un 0,68% hasta los 48.212,97 puntos. El valor más alcista es Home Depot, que sube un 2,41%, mientras que el más bajista es UnitedHealth, que cede un 0,69%.

El S&P 500 sube un 0,97%, en 6.786,36 puntos, mientras que el Nasdaq avanza un 1,41% hasta los 23.013,45 puntos. 

Wall Street viene de una jornada de más a menos ayer, en la que los grandes índices neoyorquinos acabaron cerrando con caídas significativas: DOW JONES bajó un 0,47% en su cuarto día consecutivo en negativo, todos los transcurridos desde que el 11 de diciembre marcó máximos históricos en 48.704,01 puntos (48.886,86 puntos intradiarios el 12 de diciembre). El S&P 500 bajó un 1,16% y el Nasdaq cayó un 1,81%.

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Los valores tecnológicos volvieron a actuar de lastre en el mercado, ante la preocupación por los elevados costes de capital que conllevan las operaciones en centros de datos, con Oracle cayendo más de un 5% tras una información de Financial Times que apunta a la retirada de su principal inversor en el proyecto para un centro de datos de 10.000 millones de dólares en Michigan. Broadcom, NVIDIA o Advanced Micro Devices también registraron fuertes caídas.

Aunque los inversores se han alejado de las empresas tecnológicas últimamente, el sector va camino de cerrar 2025 con un avance de aproximadamente el 19%.

Además, los ánimos parecen haberse calmado tras la buena acogida del informe trimestral de Micron Technology, que ha batido las expectativas del mercado en su primer trimestre fiscal y ha mejorado sus pronósticos para el trimestre actual. Sus acciones se disparan un 13,5% en la mañana neoyorquina.

Micron espera unos ingresos de unos 18.700 millones de dólares en el trimestre actual, significativamente superiores a los 14.200 millones de dólares previstos por los analistas, debido a una fuerte demanda gracias al auge de la inteligencia artificial. La compañía se anotó unas ganancias de 4,78 dólares por acción sobre unos ingresos de 13.640 millones de dólares, frente a la previsión de los analistas de 3,95 dólares de ganancias y 12.840 millones de ingresos.

Pero los ojos estaban puestos hoy especialmente en el informe del IPC de noviembre, que se ha conocido poco antes de la apertura. Es el primer informe de inflación que se conoce desde el cierre del Gobierno federal, y ha sorprendido al mercado: Si los analistas esperaban una lectura del 3,1% para la tasa general, finalmente ésta se ha situado en el 2,7%, de acuerdo con las cifras del Departamento de Trabajo. En septiembre, la tasa anual del IPC fue del 3%. El IPC subyacente (un índice de precios que excluye el los alimentos frescos y la energía por su elevada volatilidad) interanual subió un 2,6%, por debajo del 3,0% que había previsto el mercado. 

Sin embargo, al igual que ocurriera con el informe mensual de empleo del martes, los datos de inflación podrían ser menos fiables de lo habitual debido al cierre del gobierno estadounidense. De hecho, no se dispone de comparaciones intermensuales, dada la interrupción en la recopilación de datos del IPC en octubre.

La semana pasada, la Fed bajó los tipos en 25 puntos porcentuales, pronosticando solo un recorte más en 2026, si bien volvió a recordar que las futuras decisiones irán ligadas a los datos que se vayan publicando. En la renta fija, siempre muy pendiente de las expectativas de la política monetaria, hoy la rentabilidad del bono estadounidense a diez años baja hasta el 4,109%.

En otras referencias macro del día, el índice de la Reserva Federal de Filadelfia cayó a -10,2 en diciembre, según datos publicados el jueves. Por otro lado, el número de personas que pidió ayudas estatales por desempleo en EEUU se situó la semana pasada en 224.000, por debajo de las 225.000 previstas. No obstante, la cifra de la semana previa fue revisada al alza, a 237.000, frente a una estimación anterior de 236.000.

La media móvil de nuevas solicitudes de las cuatro últimas semanas, que se considera una indicación más fiable de las tendencias en el mercado laboral ya que reduce los picos de volatilidad, subió a 217.500.

Volviendo a los valores protagonistas del mercado, las acciones de Coinbase avanzan después de que la compañía haya anunciado el lanzamiento de varios nuevos productos de inversión, profundizando su estrategia para transformarse en una plataforma de intercambio que lo abarque todo, en competencia directa con Robinhood.

La plataforma de intercambio de criptomonedas comenzará a ofrecer acciones y una negociación optimizada de futuros y en su plataforma, además de una oferta de mercados de predicción en colaboración con Kalshi. También permitirá la negociación de versiones tokenizadas de activos tradicionales. Las acciones de Coinbase suben un 4%. 

Los inversores tendrán que estar atentos también a la cotización de Lululemon Athletica. Según una información adelantada por The Wall Street Journal, el inversor activista Elliott Investment Management ha acumulado una participación de más de mil millones de dólares en la minorista en apuros. Elliott llevaría meses trabajando sobre Lululemon con la ejecutiva Jane Nielsen, exdirectora financiera y directora de operaciones de Ralph Lauren. Lululemon Athletica busca un sustituto para el actual CEO, Calvin McDonald, que dejará el cargo a finales de enero. Las acciones suben un 6,15% en los primeros compases de la negociación.

Trump Media se dispara en Bolsa un 25% tras anunciar su fusión con TAE Technologies. La operación, íntegramente en acciones, está valorada en más de 6.000 millones de dólares y se espera que se cierre a mediados de 2026.

En el sector farmacéutico, hay que tener en cuenta que Eli Lilly & Co ha asegurado que un ensayo de etapa avanzada muestra que su píldora contra la obesidad ayudó a los pacientes a mantener la mayor parte de su pérdida de peso después de que cambiaron directamente desde las inyecciones de Wegovy y Zepbound.

Los datos positivos del ensayo sugieren que la píldora podría ser un tratamiento eficaz para la transición de pacientes que desean mantener su pérdida de peso, pero no desean recibir inyecciones semanales a largo plazo. Muchas personas que suspenden estas inyecciones recuperan gran parte del peso que perdieron inicialmente.

En los mercados de materias primas, los precios del petróleo se mantienen al alza mientras los inversores siguen monitoreando las negociaciones de paz en Ucrania, incluyendo posibles sanciones adicionales a Rusia, y el bloqueo de EEUU a los petroleros venezolanos. Los futuros del petróleo West Texas estadounidense suben un 0,93% hasta los 56,35 dólares por barril, mientras que el crudo Brent de referencia internacional avanza un 0,75% hasta los 60,13 dólares.

El euro cede un 0,04% frente al dólar hasta dejar el tipo de cambio en 1,1739 dólares por cada moneda única.