El precio de venta de su negocio en Pacífico Sur asciende a 90 millones de dólares. Amper obtuvo, en el momento de la firma de la transacción, septiembre de 2016, 26 millones de dólares y en abril de 2017, 4 millones de dólares adicionales, habiendo recibido por tanto un total de 30 millones de dólares en concepto de adelantos a cuenta de la operación; quedando por tanto 49 millones de dólares pendientes de recibir, entre los que deben computarse los 4,5 millones de dólares informados en junio de 2018, que continúan en depósito y aún no han sido utilizados, explica la entidad en un hecho relevante ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Amper explica que el precio pactado era de 79 millones de dólares, aunque esta cantidad debía ser objeto de revisión en el momento de cierre de la operación para fijar el precio definitivo según contrato. La posición financiera neta de las sociedades que se enajenan ha mejorado respecto a diciembre de 2016, y por tanto el precio final de la transacción se verá incrementado en una cantidad superior a 11 millones sobre la previsión inicial.
La tecnológica madrileña explica que los recursos obtenidos con esta venta se destinarán a la amortización total de la deuda financiera no convertible derivada del contrato de financiación sindicada suscrito entre las entidades acreedoras y Amper en fecha 13 de abril de 2015, del que en este momento quedan remanentes 12,9 millones de euros.
La compañía que lidera Clemente Fernández apunta también que destinará este importe a la financiación del crecimiento orgánico e inorgánico previsto y comprometido por la compañía en su plan de negocio 2018-2020, “que permitirá su cumplimiento y superación”.
Las acciones de Amper suben con fuerza este martes en el mercado continuo hasta los 0,269 euros con un alza del 10,5%. En lo que va de año, los títulos de la compañía con sede en Pozuelo de Alarcón se revalorizan un 42,8%.
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