José Luis Cava se fija en que este mes, The Economist ha publicado cuatro portadas en las que están anunciando el fin del mundo. “Esto ha provocado un miedo en la gente terrible, y lo que nos hemos encontrado es que todo el mundo ha vendido. Ya no quedaba nadie por vender. La excusa: la política arancelaria de Trump, cuando no tenían ni idea de los acuerdos finales, porque todavía no se ha firmado ninguno. No tienen ni idea. Y se lo han inventado todo. Han vendido tanto miedo a la gente que han vendido”.
Los que han liderado el movimiento a la baja de las bolsas han sido los siete magníficos, explica. Por ellos, presta atención al ETF de los siete magníficos, que tiene como nemónico MAGS. “El pasado 9 de abril, el volumen negociado se disparó. Esto supone claramente que la gente vendió en masa porque estaba muerta de miedo. Y vimos cómo el índice de codicia y miedo de la CNN estaba por debajo de 4.
La barrita del precio abrió a la baja, pero cerró en máximos. Esto significa que ahí hubo una capitulación final. Ahí los inversores particulares vendieron hasta la camisa y las manos fuertes se la quedaron”.
En cuanto al S&P 500, indica que experimentó una fuerte caída desde los máximos del 20 de febrero, y el 9 de abril hizo un mínimo en la zona de 4.800. Ha rebotado hasta la zona de 5.600. ¿Qué ha recuperado? “Calculando los retrocesos de Fibonacci, prácticamente ha recuperado el 0,618 de toda la caída desde el 20 de febrero. El 0,618 pasa por la zona 5.634”.
¿Qué sucedería si ahora el S&P 500 superara el 5.634 y recuperara más del 61,8%? Que se va otra vez a máximos, según el experto. “¿Y todo este miedo para qué? Para que ellos se queden con los títulos”.
En cuanto a Bitcoin, se fija en su índice de volatilidad, que tiene como nemónico BVI V, que mide la volatilidad implícita de Bitcoin a 30 días. Explica que estaba marcando un máximo el 9 de abril, y desde entonces ha experimentado una fuerte caída. ¿Qué pasaría si perforara la zona de 48? “Indudablemente, sería alcista para Bitcoin”.
Además, hay otro hecho que le llama la atención. Se están incrementando las primas que exigen los inversores para invertir a largo plazo. Y hay una correlación muy fuerte entre el incremento de esas primas y la subida de Bitcoin. “Por lo tanto, yo soy de los que piensa que, a pesar de que en la zona comprendida entre 96.000 y 100.000 hay un muro, es muy probable que intente superarlo”. Y en algunos estados, como Arizona, los parlamentarios ya han aprobado una ley para destinar hasta el 10% de los fondos públicos que tengan en la tesorería del estado y en los fondos de pensiones a invertir en criptomonedas. “Luego tenemos viento de cola en Bitcoin”.