El general Romano, se encontraba en el año 59 como gobernador de Britania,  disponía de 2 legiones, poco más de 10.000 hombres, frente a los más de 100.000 guerreros (según distintos autores) que tenía su enemiga la reina Boudica.  

Suetonio se vio en una clara inferioridad y decidió que no podía combatir contra el ejército de la reina directamente, estuvo dando vueltas y vueltas durante muchos meses, jugando al gato y al ratón, evitando entrar en combate en todo momento, hasta que vio la ocasión.  

En un momento de ese juego, encontró un sitio excepcional, donde tenía un monte muy frondoso a la espalda, estaba cuesta abajo, de forma que el enemigo solo podría atacar de frente y encima con un pequeño desnivel. Suetonio puso a sus tropas en el formato tradicional Romano, de forma que el primer soldado peleaba durante 1 y 3  minutos luego se retiraba a la última fila, mientras el siguiente soldado ocupaba su lugar.  

Los bravos soldados británicos entraron a tropel, estorbarse unos a otros y saltando sobre lluvia de flechas, lanzas y compañeros muertos. Si han visto la película 300, esto fue algo parecido, pero con más de 10.000 soldados romanos.

La victoria fue absoluta sobre las hordas Británicas  que se vieron entorpecidas a la hora de salir porque al fragor de la batalla las propias familias de los guerreros habían ido a contemplar el exterminio del ejército romano, poniendo carros y bueyes en la cola del ejercito, haciendo un semicirculo, por el que no pudierón huir los soldados al darse cuenta que estaban perdiendo la batalla. Aquella batalla se conocería como la matanza de Watting Street  ya que se estima que murió el 80% de los britanicos.  El general Suetonio apaciguó el reino Romano de Britania.  

Quizás lo hayan adivinado, las lecciones que nos da Cayo Suetonio Paulino a los inversores:  

La primera es no entrar en el mercado a cualquier precio, hay que ser paciente y esperar la oportunidad para invertir en el momento adecuado. Hay que proteger el capital y ser selectivo en nuestras decisiones de inversión. Hay que saber esperar a que el precio de un activo llegue a su nivel óptimo de entrada, para eso están los soportes, ver que funciona cómo soporte antes de "atacar" el precio.  

La segunda es la disciplina del inversor, el dinero líquido es un activo caliente para los inversores, hay que ser disciplinado y saber que es un activo que ha costado mucho ganarlo y que hay que invertirlo cuando encontremos el "mirlo blanco" del mercado. Hay que aprender a buscarlo. hay que ser más fuerte mentalmente que el mercado. Tenemos un método de inversión y lo ejecutamos.  

La tercera es que los inversores celebran la presa antes de cazarla, cuando el mercado está caliente, no se calculan los riesgos y debemos siempre tener un stop de seguridad que permita minimizar las pérdidas, una mala posición no puede consumir el 80% de nuestro patrimonio.  

Todo inversor debe tener una premisa, preservar el capital, como lo hizo el general Suetonio, y buscar las mejores oportunidades de inversión que hay en el mercado.

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