Jornada de números rojos en la renta variable nacional al calor de las advertencias que han lanzado la Troika y el FMI sobre el sector financiero español. A saber: los riesgos sobre la economía y, sobre el sector, todavía son elevados por lo que es necesaria una vigilancia y supervisión continua. A pesar de que las medidas que se han tomado avalan el impulso a la liquidez y solvencia del sistema, no parece ser suficiente. El índice nacional, el Ibex35, se dejó un 0.2% y marcó en los 8300 puntos su último precio.

Lo hizo, como no, con los bancos como principal lastre. Bankinter
se dejó un 1.57% y marcó en los 2.8220 euros su último precio. Banco Sabadell descontó un 1.3% - hasta los 1.4360 euros – mientras que Caixabank y Banco Popular contabilizaron caídas de más de un punto porcentual, con lo que mañana comenzarán a cotizar desde los 2.7370 euros y los 0.6350 euros.

Caídas a las que no fueron ajenas los dos grandes bancos: BBVA descontó un 0.9% de su cotización, hasta los 7.1820 euros, mientras que las acciones de Banco Santander cerraron la jornada en los 5.4980 euros, tras una caída de más del 0.7%.

Una penalización que replicaron el resto de grandes valores del mercado. Telefónica perdió un 1.08% y marcó en los 10.4850 euros su último precio. Iberdrola perdió un 0.5% - hasta los 4.1500 euros – mientras que Inditex y Repsol fueron las únicas que salvaron los números rojos y cotizaron con avances del 0.1% en le caso de la petrolera y del 1.4% la textil gallega, hasta los 97.22 euros.

Subidas que poco tuvieron que ver con las experimentadas por Sacyr Vallehermoso que consiguió firmar la sesión sobre los 2.1930 euros tras subir más de tres puntos porcentuales. Una subida a la que acompañaron Inditex, Jazztel e Indra, con revalorizaciones de más de un punto porcentual al cierre de la sesión.