Recortes en Banco Sabadell. La dirección de la entidad bancaria cotizada en el Ibex 35 ha propuesto a los sindicatos un plan de ajuste de la plantilla que contempla el despido de 1.900 empleados, lo que supone en torno a un 13% de la plantilla que la empresa tiene en España, de 15.000 trabajadores

Sabadell ha comunicado que encargará a Manpower el plan de recolocación. Su intención es conseguir que la voluntariedad sea el criterio de afectación prioritario en el ERE y aplicar un plan social de recolocaciones "muy por encima de los estándares de mercado" y que llevará a cabo Manpower. Asimismo, ha trasladado su interés en proteger a la plantilla con mayor dificultad de acceso al mercado laboral, es decir, aquella con entre 50 y 55 años. Además, la intención de Sabadell es incluir un mecanismo de prejubilación, bajas incentivadas y un plan social de recolocación, que llevará a cabo Manpower, "muy por encima de los estándares de mercado".

El plan de ajuste se aplicará, sobre todo, en la red de oficinas y 'servicing' al concentrar el 85% del total de salidas propuestas, si bien la afectación final dependerá del empeño y del esfuerzo de la mesa negociadora.

Banco Sabadell fundamenta este procedimiento en la búsqueda de mayor rentabilidad, contemplada en su plan estratégico de 2021-2023. En este plan, la entidad señalaba que continuaría con su esfuerzo en la contención y reducción de costes derivados de la transformación del modelo de negocio, la automatización y la simplificación de procesos, y recogía el objetivo de reducir 100 millones de euros en costes.

En este sentido, la entidad alega que se ha visto afectada por las caídas de rentabilidad que afectan a todo el sector financiero. La rentabilidad del banco se sitúa alrededor del 3%, muy por debajo del coste del capital, del 9%. Sabadell sigue viéndose muy afectada por el actual entorno de bajos tipos de interés, la necesidad de ejecutar provisiones a causa de la crisis provocada por la pandemia y por la mayor inversión en tecnología que requiere hoy el sector financiero.

Este ERE se produce después de que a finales de 2020, el banco presidido por Josep Oliu pactase con los sindicatos la salida de alrededor de 1.800 empleados del banco. Al respecto, el banco ha trasladado que este plan de salidas voluntarias no habría sido suficiente para ganar en competitividad y garantizar la sostenibilidad.