En cuanto a referencias macroeconómicas, hoy habrá que estar atentos al índice manufacturero y al gasto en construcción de Estados Unidos. Según los analistas, y a tenor de lo que se ha observado durante el mes pasado, cualquier dato relativamente negativo afecta de forma positiva a la cotización en el parqué estadounidense, ya que los expertos consideran que el tapering podría retrasarse.
Ya durante la semana pasada se conoció que el gasto de los consumidores estadounidenses subió apenas un 0,1% en julio debido al recorte de costes de la administración y la desaceleración en el aumento de la renta disponible de las familias. El Departamento de Comercio estadounidense ha revistado al alza el dato de junio hasta el 0,6% desde el 0,5% anterior. (Ver noticia
Parte de esta tímida mejora se debe a la caída de los salarios en comparación con la del mes anterior. Los ingresos personales se incrementaron ese mismo mes apenas un 0,1%, hasta 14.100 millones de dólares.
También supimos que los precios subieron apenas un 1% en julio frente al mes anterior. Una subida que deja el dato de IPC interanual en el 1,2%, muy lejos del objetivo de la Reserva Federal a largo plazo.
Así, el bono a 10 años estadounidense pierde ligermante rentabilidad un 0,07% hasta alcanzar 2,749%
En este entorno, siguen cayendo el oro y el petróleo. El metal precioso desciende por el momento un 0,21%, hasta colocarse en los entornos de 1.393 dólares la onza.
Por su parte, el petróleo pierde cerca de un 0,21% y se sitúa en 114 dólares el barril de Brent.
El dólar se deprecia contra el euro y el par EURUSD se mantiene en el nivel de 1.3165.