Los mercados han recuperado el optimismo gracias a la expectativa de recortes de tipos, el regreso de los estímulos, la mejora del contexto geopolítico y unos sólidos resultados empresariales, con la inteligencia artificial como gran motor de crecimiento. Aunque el recorte de tipos de la Fed está prácticamente descontado, el foco está ahora en sus previsiones económicas y en la posible división interna del organismo. Aun así, el sesgo para el final de año sigue siendo positivo.
El liderazgo del mercado está rotando desde las grandes tecnológicas hacia otros sectores y hacia empresas de menor tamaño, favorecidas por el entorno de tipos a la baja. Esta rotación impulsa el atractivo de las small caps, los índices equiponderados, los mercados emergentes, así como el renovado interés por China y por Europa, donde las valoraciones son más atractivas y el crecimiento de beneficios se acelera gracias a la inteligencia artificial.
En España, el comportamiento del IBEX 35 afronta el tramo final del año con un balance muy destacado. El Ibex se sitúa entre los índices con mejor comportamiento a nivel mundial y lidera claramente entre los países desarrollados, con una revalorización superior al 60% en lo que va de ejercicio medida en dólares. Solo algunos mercados emergentes, como Ghana, presentan avances mayores.
El gran motor del selectivo ha sido el sector bancario, que ha concentrado buena parte de las subidas. Sin embargo, sus valoraciones se encuentran en niveles exigentes. El PER del sector cotiza en torno a un 43% por encima de la media de los últimos quince años, lo que reduce su potencial a corto plazo. El mercado, además, está priorizando la alta remuneración al accionista frente a la evolución del margen de intereses o las comisiones.
De cara a las próximas semanas, el escenario apunta a un mayor equilibrio dentro del índice. Los bancos podrían ceder protagonismo en favor de otros valores que han quedado rezagados durante el año. Entre ellos destaca el sector del lujo y, especialmente, Inditex, que ha presentado resultados extraordinarios, con fuertes crecimientos de ventas a tipo constante, mejora de márgenes, control de costes y una expectativa de crecimiento a doble dígito en el último trimestre del año. El fabricante gallego se beneficia además de un entorno favorable por la caída de los costes de materias primas como el algodón o el petróleo, claves para el transporte, así como de la recuperación del consumo a nivel global, apoyada por los recortes de tipos y los estímulos monetarios. A ello se suma una sólida generación de caja, ausencia de deuda y la mejora de su red logística tras los planes de modernización.
Junto a Inditex, el sector turístico también se mantiene como uno de los pilares del mercado español, con buenas perspectivas de actividad para los próximos meses. Este conjunto de factores permite compensar la posible moderación del sector financiero.
Aun así, las previsiones apuntan a un cierre de año exigente para el Ibex 35. Pese al excelente comportamiento acumulado, es poco probable que el selectivo supere sus máximos históricos en el corto plazo y, en el actual contexto, existen oportunidades de inversión con mayor potencial en Estados Unidos y en los mercados emergentes.