El liderazgo en 5G y en 5G SA facilita que la industria pueda incorporar esta tecnología a sus procesos. El 5G SA potencia las capacidades del 5G al emplearlo en toda la infraestructura de red -core y acceso radio-, lo que implica mayores velocidades de datos y fiabilidad, y una menor latencia. Esto es especialmente interesante para las empresas, ya que permite implantar funcionalidades avanzadas como el Network Slicing o el Edge Computing, que son de gran relevancia en sectores como la industria o la logística. O en los servicios que se dan en los puertos y en algunos servicios públicos, como es el de atención al ciudadano. 

Por eso, desde Telefónica llevamos varios años trabajado en las posibilidades empresariales del 5G SA a través de la realización de diversos casos de uso con clientes reales. Y, hace sólo un año, nos convertimos en la primera operadora en España en lanzar un servicio de conectividad móvil con Network Slicing 5G para empresas, que hemos instalado de forma pionera en el servicio del 112 de Extremadura. 

De este modo, el 5G SA está ofreciendo a las empresas la posibilidad de crear un ecosistema de servicios y soluciones que responden a sus necesidades específicas, incrementan su competitividad y optimizan sus procesos. 

La incorporación de las tecnologías más disruptivas de la mano del 5G

El 5G SA proporciona la flexibilidad necesaria para poder tener una red a la carta. Además, da a las empresas la posibilidad de crear una red privada virtual sobre la red pública para prestar servicios especializados, priorizando el tráfico a través de estas particiones de la red, lo que garantiza la asignación de unos recursos en exclusiva; el 5G SA sirve para desarrollar nuevos servicios gracias a su capacidad de potenciar otras tecnologías, como es el caso del Edge Computing, la Inteligencia Artificial (IA) o el Internet de las Cosas (IoT).

El 5G proporciona 100 veces más velocidad que las redes 4G y es más segura, pero para optimizar el uso de aplicaciones que necesitan procesar muchos datos, como es el caso de las soluciones de realidad aumentada, es necesario que el procesamiento se traslade al borde de la red. La combinación de esta tecnología con el Edge Computing posibilita que la información viaje a una mayor velocidad a una menor distancia para pueda ser procesada.  

Cuando se procesan los datos en ubicaciones cercanas al dispositivo que los genera, disminuye la cantidad de información que hay que mandar a la nube, lo que hace que se reduzca el tráfico de red y los costes que se asocian con el almacenamiento y la transmisión de datos, reduciendo así la dependencia de servidores cloud o de centros de datos situados a miles de kilómetros. Esto se traduce en una mayor facilidad para controlar en remoto dispositivos y máquinas industriales, o la puesta en marcha de servicios donde la latencia es fundamental, como la realización de operaciones quirúrgicas en remoto, o la replica de Gemelos Digitales de fábricas en otras ubicaciones. 

La incorporación de la IA predictiva a las redes 5G es una mejora tecnológica que permite detectar con antelación los problemas que puedan surgir en la fabricación, desechando productos defectuosos antes de que sean fabricados y llevando a cabo un mantenimiento predictivo. Esto contribuye a una mejor toma de decisiones. 

El avance en la sensorización y la conectividad a través del IoT favorece un mejor rendimiento de los operarios a la hora de trabajar con las máquinas y los datos que generan, contribuyendo a una mejora de la producción y a una reducción de accidentes, entre otros beneficios. 

En definitiva, tenemos las claves para hacer que nuestras fábricas y procesos de producción se adapten más rápidamente a las fluctuaciones en la demanda y a un entorno económico impredecible. En Telefónica tendemos la mano a todas las compañías para aprovechar esta gran oportunidad. 

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