El Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) de Perú ha anunciado el inicio del procedimiento concursal solicitado por Telefónica del Perú, la cual recientemente dejó de ser una filial de Telefónica en el país al ser adquirida por la firma argentina Integra Tec International por cerca de 900.000 euros el pasado 13 de abril.
Según el comunicado emitido por el Indecopi, la Comisión de Procedimientos Concursales ha declarado el inicio del procedimiento concursal ordinario de Telefónica del Perú, en respuesta a la solicitud presentada por la empresa el 24 de febrero de 2025. Esta información ya ha sido publicada en el Boletín Concursal del Indecopi, lo que permite a los acreedores de la compañía presentar sus solicitudes de reconocimiento de créditos ante la Comisión de Procedimientos Concursales en un plazo máximo de 30 días hábiles.
Se destaca que Telefónica del Perú renunció a la posibilidad de iniciar un procedimiento concursal preventivo, decisión que fue aceptada por las autoridades correspondientes.
La solicitud de Telefónica del Perú para entrar en concurso de acreedores fue presentada de forma voluntaria el 14 de febrero, tras registrar pérdidas netas de 3.391,59 millones de soles peruanos (aproximadamente 872,4 millones de euros) en el año 2024. Esto representó un aumento significativo del 452,83% en comparación con el año anterior, donde las pérdidas ascendieron a 613,48 millones de soles (157,8 millones de euros).
La empresa justificó su solicitud de concurso de acreedores como parte de su estrategia para abordar la reestructuración financiera y operativa. Principalmente, atribuyó esta medida a la difícil situación financiera y administrativa que ha enfrentado durante las últimas dos décadas, agravada por disputas con la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) en Perú, que le reclama alrededor de 800 millones de euros.
Al cierre de 2024, Telefónica del Perú mantenía una deuda cercana a los 1.240 millones de euros, lo que refleja los desafíos financieros a los que se enfrenta la compañía en el contexto actual. La entrada en el procedimiento concursal busca establecer un camino para la reorganización y el manejo de sus obligaciones financieras.