Las bolsas europeas han comenzado la semana en positivo y el IBEX 35 mantiene el buen tono por encima de los 15.300 puntos. Según explica Javier Alfayate, gestor de fondos en Grupo Link, la clave inmediata se sitúa en la resistencia de los 15.390. Si logra consolidarse por encima de ese nivel, el siguiente objetivo serían los 16.000 puntos, un nivel psicológico muy relevante que incluso podría extenderse hacia los 16.200, zona en la que se encuentran los máximos históricos. El analista destaca que la tendencia es claramente alcista, con máximos y mínimos crecientes, y que mientras el selectivo no pierda los 14.363 puntos —referencia de la media ponderada de 30 semanas— no hay motivos para pensar en un giro de tendencia.

Dentro del Ibex, uno de los valores más destacados de la jornada es Repsol, que cotiza por encima de los 14,77 euros. Lo relevante es que, una vez que un título supera resistencias, se abre la posibilidad de entrar en lo que llamamos “subida libre”, es decir, un escenario sin obstáculos técnicos por delante y en el que el precio puede seguir avanzando con relativa facilidad. Siempre digo que cuando un valor rompe máximos, lo más sensato es mantener las posiciones. En este caso, además, vemos entrada de dinero institucional, lo que llamamos “dinero inteligente”, que suele anticipar movimientos de continuidad. Si a esto le añadimos que el comportamiento del oro suele anticipar subidas en las materias primas y que el petróleo está mostrando signos de recuperación, creo que Repsol se beneficia de un entorno favorable.

En cuanto a la estrategia, si ya estoy dentro del valor, lo mantendría sin dudar. Para los que están fuera, yo esperaría un pequeño retroceso hacia la zona de 14,00-14,20 euros, que sería un buen punto de entrada, colocando un stop en los 12,80 euros. Este nivel es técnico y nos protege en caso de que el escenario se gire.

Hay que matizar también un aspecto: algunos analistas hablan de máximos históricos si ajustamos por dividendos. Yo prefiero no hacerlo porque eso altera las señales cuando testamos sistemas y estrategias. Pero, en cualquier caso, lo importante es el fondo: Repsol está fuerte, está en tendencia y lo más probable es que siga comportándose mejor que el mercado en el corto y medio plazo.

En cuanto a Wall Street, el S&P 500 acumula una subida del 31% en los últimos cinco meses y continúa marcando máximos históricos. Lo normal, apunta el experto, sería ver una fase de consolidación a finales de septiembre o comienzos de octubre, tras un avance tan vertical, aunque en ningún caso ello pondría en cuestión la tendencia alcista. El soporte clave se encuentra en los 6.154 puntos, donde pasa también la media de 30 semanas, y mientras no se pierda este nivel, el escenario seguirá siendo positivo. Además, la amplitud de mercado respalda la subida, con compañías industriales, medianas y pequeñas acompañando el movimiento, lo que refuerza la fiabilidad del rally.