Pasar del 955, es decir trabajar de 9 a 5 de la tarde y durante 5 días de cualquier empresa tradicional, hemos pasado a querer trabajar de 9 a 9 y durante 6 días. ¿Para ser más productivos? ¿Para calentar el asiento?
Pues ninguna de las 2 cosas, la filosofía de esta nueva modalidad de trabajo, muy enfocado a empresas de gran crecimiento, pero que buscan "darlo todo" para acortar o ampliar el "gap" que tienen con otros competidores
Esto no es nada nuevo, ya que desde 1960 en el sector de empresas de semiconductores, muchas empresas han tenido una cultura de trabajo muy intensiva en el mismo, la idea es clara, "trabajar duro hoy para poder vivir bien mañana" ya que estos trabajadores en general están muy bien remunerados y tienen diversos incentivos en función del grado de cumplimiento o éxito de sus empresas.
Y esta no es la única tendencia que se está viendo en el sector tecnológico, también se está viendo cómo los jóvenes prefieren trabajar y no consumir alcohol, todo en busca de lograr los objetivos de sus empresas. Priorizando el trabajo a las relaciones sociales.
La cuestión es clara. ¿Por qué estar en un bar si se puede estar fundando una Start Up? se ha preguntado Emily Yuan, fundadora de una empresa en Sillicom Valley, según ha indicado Wall Street Journal.
El fenómeno llega a tal nivel que dejan incluso de disfrutar vacaciones con tal de conseguir los objetivos. En el fondo es competir con China con sus mismas armas, trabajo, trabajo y trabajo.
El nuevo paradigma del liderazgo: Productividad
La cultura empresarial de la nueva élite tecnológica y los fundadores de startups ha experimentado una transformación radical, sustituyendo el antiguo hedonismo por la productividad extrema y la optimización biológica. A diferencia de las figuras de empresarios historicos , cuyas vidas empresariales se asociaban a un estilo de vida de excesos y al consumo desmedido de alcohol en sus círculos sociales, los líderes del futuro son intrínsecamente "Sanos sanisimos".
Este cambio refleja una filosofía cercana a los postulados donde el máximo lujo no es el despilfarro, sino el tiempo y la energía.
El alcohol ha dejado de ser el eje central del networking para ser visto como un detractor de la productividad y el rendimiento cognitivo. En los ecosistemas de innovación de alta velocidad, como los eventos de Inteligencia Artificial en San Francisco, esta nueva cultura se manifiesta con la ausencia notable de alcohol, reorientando toda la energía social hacia la claridad mental, la longevidad y la búsqueda incesante de la máxima eficiencia y rendimiento sostenido. La salud no es un pasatiempo, sino un activo estratégico que garantiza la ventaja competitiva en la dirección de la empresa.
¿Qué opinan las escuelas de negocio sobre esta tendencia?
La perspectiva de las escuelas de negocio sobre la tendencia del 996 es generalmente crítica y se opone a las tendencias actuales de la gestión moderna del talento.
El consenso de las escuelas de negocio y en particular en los programas de Máster en Recursos Humanos, Liderazgo y Management se centra en el bienestar, la flexibilidad y la productividad basada en resultados, no en el tiempo. Ya que unas jornadas tan intensas, van en contra de la salud física y mental de los ejecutivos y no es sostenible a largo plazo.
La salud mental es vital para afrontar una mejora de la productividad. Desde hace años se está abogando por tener buenas condiciones de trabajo, no solo económicas, sino de infraestructuras, flexibilidad y de equipos involucrados en proyectos con objetivos comunes y personas compatibles.
Pero ya saben el dicho del mundo de las Startups, "Ser un emprendedor es vivir unos años como otros no lo harán, para vivir el resto de sus vidas como otros no podrán".
Descubra las mejores escuelas de negocio para realizar un MBA en España.