Los precios en la Zona Euro suben menos de lo esperado y se acercan peligrosamente a la deflación, lo que pone más presión sobre el Banco Central Europeo (BCE) para que actúe este viernes. El IPC ha registrado en marzo, según el indicador adelantado, una subida anual del 0,5% frente a la lectura de febrero de un crecimiento del 0,7% y en comparación con el aumento del 0,6% que esperaba el consenso. La inflación subyacente también ralentiza su crecimiento al subir un 0,8% frente al dato anterior del 1,0%.

Ese 0,5% está muy lejos del objetivo de estabilidad de precios el BCE, que se sitúa en el 2%, así que no es de extrañar que David Cano, socio de Analistas Financieros Internacionales y Director General de Afi, Inversiones Financieras Globales EAFI, se pronunciara así el sábado en un encuentro sobre mercados organizado por Trader Secrets cuando ni siquiera se había conocido este dato del 0.5%: “Un 0,8% (ejemplo) de inflación es estar incumpliendo igual que si se alcanza un 3% así que, ¡BCE estás incumpliendo!”.

Cano espera que en la reunión de este jueves, el presidente Mario Draghi, anuncie un programa de comprar deuda emitida por bancos, pero con destino en la economía real, es decir, algo así como una QE americana pero condicionada a la concesión de créditos. Esta idea lleva meses barajándose, pero los analistas siempre se han mostrado muy escépticos por la difícil implantación que tendría a la hora de controlar a las entidades financieras.

Para Nicolás López, director de Análisis y Estrategia de Mercados & Gestión de Valores AV, que también intervino en el encuentro del sábado titulado “Estados Unidos vs. Unión Monetaria Europea. Emergentes vs. Desarrollados”, “es posible que el BCE anuncie algún tipo de medida para que la inflación no se les vaya de las manos”. Apuntaban López que “parece claro que algo van a hacer”, y remitía a las palabras del presidente del Bundesbank y, por tanto, miembro del BCE, Jens Weidmann, que la semana pasada no descartaba una QE o tasas sobre depósitos en negativo. No obstante, Weidmann ha matizado este fin de semana sus palabras con un “la Zona Euro no está en un ciclo deflacionista”, más acorde a sus habituales posturas de “halcón”.

El director de Análisis y Estrategia de Mercados & Gestión de Valores AV ve “difícil una QE plena como las de la Fed”, y apuesta por “medidas más de segundo niveles, como dejar de esterilizar los bonos que compararon en el marco del SMP”, esto es, devolver al mercado el dinero que imprimió para comprar bonos soberanos en los momentos más duros de la crisis de deuda en Europa. Son unos 200.000 millones de euros. López reconoce que esta herramienta es “bastante limitada pero es algo”. Este experto tampoco descarta tipos sobre depósitos negativos.

David Cano, defensor del doble mandato de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, advertía que “estamos infrautilizando los bancos centrales”: “Sólo los usamos para controlar la inflación y los bancos centrales pueden resolver muchos más problemas. Es una pena no usar la herramienta y la capacidad que tiene un banco central (…) Yo hubiera cambiado el mandato”.

María Gómez