El gigante tecnológico Apple ha anunciado este miércoles una inversión de 100.000 millones de dólares (85.820 millones de euros) para potenciar su producción en Estados Unidos y evitar posibles aranceles a sus productos. Donald Trump, fue el encargado de presentar este anuncio en la Casa Blanca, cuya Administración presentó esta y otras iniciativas como un logro para frenar a China en la batalla de los microchips e impulsar la competitividad del America First. De hecho, el mandatario ha aprovechado el acto en el Despacho Oval para anunciar que impondrá un arancel de alrededor del 100% a los semiconductores importados, pero que no se aplicará a empresas que se comprometan a fabricarlos en EE UU.
Esta inversión de la tecnológica también incluirá un nuevo programa de fabricación con el objetivo de repatriar parte de la cadena de suministro de la empresa.
Detalles de la inversión de Apple en Estados Unidos
Tras conocerse la noticia, los títulos de Apple experimentaron un aumento del 5,57%, alcanzando los 214 dólares por acción. Esta inversión se suma a otra ya realizada por la compañía en el país, que asciende a 500.000 millones de dólares (429.159 millones de euros) durante los próximos cuatro años. Dentro de esta cifra se contempla la construcción de una planta de fabricación de servidores en Houston, una academia de proveedores en Michigan y un aumento en las compras a socios locales.
Con esta nueva inversión, el compromiso total de Apple en Estados Unidos se elevará a alrededor de 600.000 millones de dólares (514.991 millones de euros), según lo anunciado por la Casa Blanca.
A principios de este año, el presidente Trump amenazó con imponer un arancel del 25% a los productos de Apple si la compañía no trasladaba la fabricación del iPhone a territorio estadounidense. Desde entonces, el CEO de la empresa ha liderado las gestiones para obtener una exención arancelaria para su producto estrella, que actualmente se produce en India.
Futuras medidas arancelarias
El anuncio de esta inversión de Apple llega en un momento en el que Trump está preparando un nuevo arancel que podría afectar a todos los productos que contengan semiconductores, con posibles repercusiones a partir de la próxima semana. Esta medida se suma a una serie de aranceles específicos que entrarán en vigor este jueves, afectando a numerosos socios comerciales.