El IBEX 35 cerró la semana pasada marcando nuevos máximos históricos. Lleva tres sesiones consecutivas por encima de los 17.100 e incluso el viernes alcanzó los 17.200 puntos en intradía. Todo apunta a un rally de fin de año que se ha adelantado respecto a ejercicios anteriores. El impulso alcista del Ibex se remonta a finales de abril y principios de mayo. Desde entonces, el índice ha mostrado una notable fortaleza, situándose entre los más sólidos de Europa, junto con otros mercados financieros como el austríaco. Técnicamente, los objetivos previstos para el cierre del año ya se han cumplido en el Ibex. Para mí, los niveles clave del selectivo se sitúan entre 16.800 y 17.100 puntos, aunque mantengo como soporte principal la zona de los 15.840 puntos, donde pasa la media de 30 semanas. Mientras los grandes valores sigan impulsando al índice —Santander, BBVA, Inditex o Iberdrola—, la tendencia continuará siendo alcista y que debemos aprovecharla.

Y, precisamente, hoy BBVA vuelve a liderar las subidas del Ibex 35, acumulando máximos históricos consecutivos. El valor se dirige hacia los 20 euros por acción, un nivel psicológico clave para los inversores. El valor mantiene fortaleza técnica e impulso. Tras cumplir el objetivo por oscilación en la zona de 17 euros, el banco continúa en subida libre. Mientras siga mostrando fuerza relativa en el contexto europeo, creo que la mejor estrategia es mantener posiciones. El único nivel bajista que vigilo con atención está entre los 17,10 y los 17,20 euros. Solo si el precio perforara esa zona cambiaría mi visión actual. Por ahora, pienso que BBVA alcanzará los 20 euros a corto plazo.

El caso de Telefónica es muy diferente. El valor continúa mostrando una clara debilidad y se mantiene como uno de los tres peores del Ibex en este 2025. Hoy vuelve a caer con fuerza y cotiza alrededor de los 3,30 euros, tras arrancar el año cerca de los 4 euros y llegar a superar en agosto los 4,90.  Se encuentra en una tendencia claramente bajista, con máximos y mínimos descendentes, y además en contra del comportamiento que están mostrando el Ibex y los principales índices mundiales. Después de perder los 3,60 euros, el valor entró en una fase de continuidad bajista, y ahora mismo su gráfico parece un “cuchillo cayendo”: Entrar sería asumir un riesgo innecesario, ya que muestra un debilidad especialmente dañina. Mi visión es que, cuando un valor se muestra así de débil y va contra tendencia, lo más prudente es no tenerlo en cartera. La resistencia más inmediata está en los 3,77 euros, y solo un rebote hacia la zona de los 4,10 euros —donde pasa la media y donde anteriormente chocó— permitiría ver cierta mejora técnica. Sin embargo, incluso alcanzando los 4,10 euros, seguiría siendo un valor bajista desde mi punto de vista. Por todo esto, prefiero mantenerme fuera de Telefónica. No sabemos cuándo terminará esta debilidad, pero ahora mismo no veo argumentos técnicos para entrar, y creo que hay mejores oportunidades en otros valores más fuertes dentro del índice.

En Estados Unidos observo un comportamiento similar al europeo: tendencia positiva, pero con retos a la vista en 2026. Creo que el próximo ejercicio estará marcado por mayor volatilidad debido a la inflación, dudas sobre crecimiento y una posible sensibilidad más alta del mercado ante los datos macroeconómicos. Para el S&P 500 manejo objetivos en la zona de los 7.000 a 7.200 puntos hasta mayo. Posteriormente, podríamos ver correcciones bajo el patrón estacional de “sell in May and go away”. El Nasdaq, por su parte, muestra cierta pérdida de impulso ante el menor rendimiento de empresas líderes como Microsoft, Meta o Netflix. Aun así, sigo viendo posibilidades de un último tramo alcista antes de una corrección técnica. También habrá que vigilar muy de cerca el Russell, índice de pequeña y mediana capitalización, porque su comportamiento será clave para confirmar la amplitud del movimiento alcista en EEUU de cara a 2026.