José Luis Cava advierte que el sistema financiero global es frágil, y se encuentra a tan solo un shock geopolítico de que se produzca una gran crisis financiera.
Fijándose en el comportamiento de la rentabilidad del bono japonés a 30 años, indica que marca un tipo de interés del 3,1%, “pero lo más importante es que es el tipo de interés más alto de la última década. En el lado largo de la curva de tipos de interés de Japón hay problemas”.
La rentabilidad del bono americano a 30 años se encuentra en torno al 5,1% y está a punto de superar una resistencia muy importante, indica. “Estos hechos revelan claramente que algo está sucediendo en los mercados financieros globales, porque en el caso de que tanto la rentabilidad del bono japonés se incrementara, también lo haría la rentabilidad del bono americano. Y estamos viendo cómo se está produciendo una clara debilidad en las subastas de deuda pública, tanto japonesa como en Estados Unidos”.
La primera conclusión a la que llega es que hay un problema, y en el caso de que se produjera un shock geopolítico, muy probablemente se produciría una crisis financiera.
El experto señala que en este momento en que estamos viendo que los mercados de renta fija se está calentando, el oro sigue presentando “una clara tendencia alcista, y tras la corrección que vimos, está retomando la senda alcista y está tratando de conseguir de nuevo los máximos alcanzados en la zona de los 3.500 frente al dólar”.
Además, Bitcoin está intentando superar los máximos de enero. “En el momento en que los tipos de interés a largo plazo están subiendo, la combinación oro-Bitcoin está actuando como un refugio, como una cobertura global frente al polvorín macroeconómico de los mercados de renta fija”.
También se centra en un detalle adicional. “Estamos asistiendo a una intervención sigilosa por parte del sistema de la Reserva Federal. Durante estas últimas semanas estamos viendo que, de una forma muy discreta, el sistema de la Reserva Federal está proporcionando liquidez, a través de líneas SWAP, al Banco Central Europeo. Esto significa que hay unas tensiones financieras globales, porque si el BCE tiene que pedir ayuda a la Fed para que le suministre liquidez vía SWAP, es que aquí falta liquidez”.
Cuando la Reserva Federal suministra liquidez al BCE, ¿qué consecuencias tiene? “En primer lugar, debemos tener en cuenta que esto no es flexibilización cuantitativa, esto no es un QE, no incrementa, técnicamente, el balance del sistema de la Reserva Federal. Ahora bien, el fin que persigue el sistema de la Reserva Federal con suministrar liquidez a una semana al BCE es que este no venda sus tenencias de bono americano. Está incrementando la liquidez, y está disminuyendo la volatilidad”.
Para el analista, esto favorece a la subida del oro, favorece la subida del Bitcoin y también favorece la subida de las bolsas.