Los futuros ligados al índice DOW JONES suben un ligero 0,02% hasta los 47.749,50 puntos, mientras que los del S&P 500 suben un 0,04%, en 6.849,50 puntos. Los futuros del NASDAQ 100, sin embargo, retroceden un también escaso 0,05%, en 25.614,90 puntos.
Wall Street viene de una jornada a la baja ayer lunes: el DOW JONES bajó un 0,45%, por el 0,35% que se dejó el S&P 500 y el 0,14% que retrocedió el tecnológico Nasdaq. De los 11 sectores del S&P 500, el tecnológico fue el único que cerró en positivo, impulsado por las ganancias de varias empresas de semiconductores tras una noticia de The Information que indica que Microsoft está considerando diseñar chips personalizados con Broadcom.
Sigue en directo la cotización de DOW JONES Ind Average
Sin embargo, la presión de os intereses de la deuda fue demasiado lastre para la renta variable. La rentabilidad del bono estadounidense a diez años se sitúa hoy en el 4,162% en el mercado secundario, mientras persiste la preocupación por el impacto de la inflación persistente.
Esta semana, los operadores esperan la decisión de la Reserva Federal sobre los tipos de interés. La institución arranca hoy su última reunión del año, si bien las decisiones se conocerán mañana miércoles. Los operadores dan una probabilidad del 89,4% a que haya un recorte de tipos de 25 puntos, según la herramienta Fedwatch de CME Group, mientras que la probabilidad de que se mantengan en su rango actual, entre el 3,75% y el 4%, es de apenas un 10,6%.
Pero más allá de este recorte, la incertidumbre es muy elevada. “Si bien un recorte de tasas parece casi seguro en este momento, las proyecciones económicas de la Fed y los comentarios del presidente Powell influirán significativamente en la reacción de los mercados, no solo esta semana, sino que podrían marcar la pauta para el resto del mes”, avisa Bret Kenwell, analista de inversiones estadounidenses de eToro. “Tras la reciente caída de las acciones y las criptomonedas, los inversores con aversión al riesgo esperan que la Fed facilite el rally de fin de año en lugar de echar agua fría sobre el reciente rebote”.
Kenwell cree que la Fed está sopesando una confluencia de factores antes de tomar su decisión: una inflación rígida, un panorama macroeconómico incierto, datos económicos retrasados por el cierre récord del gobierno estadounidense y las expectativas de un nuevo presidente. “Hay muchos factores variables para la Fed en 2026. (...) Eso plantea la pregunta clave: ¿Podrá la Fed adoptar un tono acomodaticio si estos factores persisten en 2026, o su doble mandato mantendrá a raya a los partidarios de una política monetaria flexible?”.
Lo cierto es que la salud de la economía estadounidense parece endeble. Por ejemplo, UBS ha lanzado un reciente informe con las perspectivas económicas de cara a los próximos años, con el mensaje clave de que el crecimiento de EEUU descansa sobre un “mercado muy estrecho”. “Una parte considerable de la economía estadounidense está en recesión”, advierte el banco suizo, que explica que la riqueza del mercado de valores impulsada por la IA "respalda el consumo de los hogares con ingresos altos, mientras que otros hogares se encuentran bajo una presión creciente”.
En el ámbito empresarial, uno de los grandes protagonistas es NVIDIA después de que el presidente de EEUU, Donald Trump, haya señalado que el gigante de los semiconductores podrá enviar sus chips H200 a ‘clientes aprobados’ a China, con la condición de que una cuarta parte de las ventas se pague al gobierno estadounidense. Trump escribió en Truth Social que el presidente chino, Xi Jinping, “respondió positivamente” al acuerdo.
El CEO de NVIDIA, Jensen Huang, se reunió con Trump la semana pasada, y el acuerdo supone una victoria para el gigante tecnológico tras meses de negociaciones. El H200 es una versión más avanzada del H100 de la familia Hopper, pero de inferior capacidad que los Blackwell. De cara al mercado chino supone un avance, dado que hasta ahora el chip más avanzado que podía comercializarse allí era el H20 (una versión de capacidad reducida del H100).
Las acciones de NVIDIA llegaron a subir un 2% en el mercado after hours, pero se sitúan prácticamente planas en la preapertura.
Las acciones de Toll Brothers caen más de un 4% en la mañana neoyorquina después de que los resultados trimestrales de la constructora de viviendas de alta gama se hayan quedado por debajo de las expectativas en lo que respecta al beneficio. En su cuarto trimestre fiscal, Toll Brothers reportó ganancias por acción de 4,58 dólares, en comparación con las estimaciones de 4,89 dólares por título de los analistas. Los ingresos ascendieron a 3.410 millones de dólares, en este caso sí superando las estimaciones del mercado de 3.310 millones de dólares.
Las acciones de AutoZone caen más de un 2% tras decepcionar también con sus cuentas, en este caso del primer trimestre fiscal. AutoZone ganó 31,04 dólares por acción sobre unos ingresos de 4.630 millones de dólares, mientras que los analistas habían pronosticado 32,51 dólares por título en ganancias y 4.640 millones en ingresos.
Habrá que tener en cuenta que en los próximos días presentarán también sus cuentas empresas como Adobe, Oracle (miércoles), Broadcom o Costco (jueves).
Las acciones de Home Depot se mueven con caídas superiores al 1% en Wall Street después de que la minorista especializada en mejoras para el hogar haya emitido una previsión de ganancias para 2026 por debajo de lo esperado. La compañía prevé que las ganancias diluidas ajustadas se expandan entre el 0% y el 4%, mientras que los analistas habían augurado un crecimiento del 5,2%.
Los inversores seguirán atentos también a las cotizaciones de Paramount, Warner Bros. Discovery y Netflix, después de que ayer Paramount lanzase una OPA sobre Warner a 30 dólares por acción, en respuesta al acuerdo que la compañía había alcanzado para ser comprada por Netflix. La oferta de Netflix es de 27,75 dólares por título, pero se dirige solo a los estudios y la plataforma de streaming, sin incluir el negocio de televisión.
En los mercados de materias primas, los precios del petróleo intentan recuperarse de las pérdidas del 2% sufridas ayer, con los mercados atentos a las conversaciones de paz para poner fin a la guerra de Rusia en Ucrania y a la inminente decisión sobre los tipos de interés en EEUU. Los futuros del West Texas estadounidense suben un 0,32% hasta los 59,07 dólares por barril, mientras que el petróleo Brent sube un 0,32% hasta los 62,69 dólares.
El euro sube un 0,04% frente al dólar hasta dejar el tipo de cambio en 1,1640 dólares por cada moneda comunitaria.