AstraZeneca rechazó la última oferta de adquisición de Pfizer al considerarla demasiado baja, dejando a las dos empresas en un punto muerto sobre un acuerdo que supondría la creación de la mayor farmacéutica del mundo.

La propuesta por parte de Pfizer habría ascendido a 69.400 millones de libras o, lo que es lo mismo, 117.000 millones de dólares. La compañía aseguró que se trataba de su oferta definitiva y que no tenía en cuenta el valor de la cartera de proyectos de la farmacéutica británica de medicamentos experimentales.

La operación valoraba a la firma en 55 libras por acción. AstraZeneca dijo que el precio tendría que ser superior a las 58,85 libras por título para poder satisfacer a sus accionistas.

La mayoría de los analistas considera que Pfizer aún podría lanzar una nueva ofensiva antes de que venza el plazo para adquirir a la compañía, de acuerdo con la ley de adquisiciones del Reino Unido, que sería el 26 de mayo. La farmacéutica aseguró que no realizaría, en cualquier caso, una compra hostil.

En este sentido, los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión muestran que Pfizer se encuentra en fase de consolidación, mientras que recibe una
puntuación de 7 puntos en una escala que oscila del 0 al 10.

Este análisis técnico pone de manifiesto que aunque la tendencia a medio plazo es bajista, a largo plazo se sigue manteniendo alcista. El volumen a medio y largo plazo es creciente, además de que la volatilidad que presenta el activo es decreciente en el tiempo. Sin embargo, el único punto negativo que destacan estos indicadores es el momento total rápido, que se encuentra en negativo.