Mientras en países como Alemania y Estados Unidos el mercado del oro físico está consolidado, en otros como España, Italia o Portugal se encuentra aún en una fase incipiente. Esto ha dado lugar a la proliferación de empresas comerciales que, sin una regulación clara ni garantías estructurales, ofrecen productos que aparentan ser seguros pero que carecen de transparencia en cuanto a costes, gestión y custodia del metal.

En este contexto, es fundamental aportar claridad desde el punto de vista técnico y legal para que los potenciales inversores dispongan de la información necesaria que les permita tomar decisiones informadas y seguras.

La Iniciativa Europea y la Necesidad de Regulación

Organismos europeos como la ESMA (European Securities and Markets Authority), la EBA (European Banking Authority) y el FATF-GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional) trabajan activamente en la creación de una normativa común que regule la comercialización de oro físico a clientes minoristas. No obstante, en ausencia de un marco uniforme a nivel comunitario, algunos Estados miembros han adoptado regulaciones más avanzadas que buscan otorgar mayores garantías al ahorrador.

Es el caso de Alemania e Italia, donde se han establecido requisitos específicos para los operadores de oro físico de inversión, reconociéndolos como Bancos de Metales, una categoría diferenciada de la banca tradicional, sometida a mayores niveles de supervisión y transparencia.

Requisitos Esenciales de un Banco de Metales

Un Banco de Metales regulado debe cumplir, entre otros, con los siguientes requisitos:

  • Capital mínimo de 60.000 euros totalmente desembolsado. A diferencia de los bancos tradicionales, el Banco de Metales gestiona el oro en custodia como un activo completamente segregado del balance de la entidad. Esto implica que, en caso de insolvencia del banco, el oro del cliente no se ve afectado.
  • Advertencia: Esta protección no aplica a empresas comerciales que venden oro como si se tratase de una tienda minorista, ya que el oro no está separado de los activos de la empresa.
  • Inscripción en un registro oficial bajo supervisión pública. Por ejemplo, en Italia los Bancos de Metales deben registrarse en el Banco de Italia y, a partir de 2025, también en el registro de la OAM. Además, están obligados a reportar mensualmente todas sus operaciones, así como a cumplir con normativas AML (Anti-Lavado de Dinero) y KYC (Conozca a su Cliente).

Recomendaciones Clave para Comprar Oro Físico

Para invertir con seguridad en oro físico dentro del marco europeo, se recomienda seguir estos criterios fundamentales:

  1. Elegir un Banco de Metales debidamente autorizado y supervisado.
  2. Preferir entidades con forma jurídica SpA (Sociedad per Azioni) o equivalentes: En Italia, por ejemplo, las SpA están obligadas a contar con tres auditores externos independientes, que revisan mensual y trimestralmente las operaciones y emiten informes públicos verificables.
  3. Custodia en fundiciones certificadas por la LBMA (London Bullion Market Association): Esto garantiza la pureza del oro (999), su liquidez inmediata y la autenticidad del depósito.
  4. Asignación física del oro al cliente: Solicitar que el oro se asigne directamente a la cuenta de depósito personal del comprador para evitar posibles conflictos o pérdidas en caso de quiebra de la entidad o del custodio.

¿Guardar el Oro en Casa? Riesgos y Consideraciones

Si bien algunos inversores optan por recibir el oro en su domicilio, esta práctica conlleva riesgos considerables. Al retirar el oro del circuito LBMA, se pierde la trazabilidad, la verificación de autenticidad y, con ello, su "circularidad" como activo financiero. Además, el oro entregado físicamente puede estar sujeto a falsificaciones que dificulten su posterior venta al valor real de mercado.
Por ello, mantener el oro en custodia dentro de un Banco de Metales que utilice una fundición LBMA es la opción más segura y eficiente para conservar su valor y liquidez.

Sobre los Certificados Digitales Vinculados al Oro

En la actualidad, también existen certificados digitales respaldados por oro físico. Para que estos sean válidos y seguros, deben cumplir dos condiciones esenciales:

  1. Estar emitidos y custodiados por una entidad regulada en la Unión Europea, conforme al reglamento MiCAR aprobado por el Parlamento Europeo.
  2. Estar respaldados por un certificado físico de depósito emitido por un Banco de Metales reconocido, que confirme la existencia real del oro y su asignación al certificado digital.

Sin estos dos elementos verificables, la autenticidad del activo digital es altamente cuestionable.

Conclusión

El mercado del oro físico como herramienta de ahorro e inversión está en plena evolución y se encuentra en el centro de futuras reformas normativas a nivel europeo. No obstante, hoy ya es posible invertir con seguridad siempre que se respeten los siguientes principios:

  • Operar exclusivamente con Bancos de Metales regulados.
  • Priorizar entidades con forma jurídica SpA o equivalente.
  • Verificar que el oro esté custodiado en una fundición certificada LBMA.
  • Asegurarse que el oro esté físicamente asignado al comprador.
  • La prudencia, la regulación y la transparencia son los pilares para invertir con confianza en oro físico.