"La nave se movía muchísimo. Iba rapidísimo y no seguía la línea de la costa. Estaba en mar abierto. Un chico francés y yo bajamos a hablar con la tripulación y nos dijeron que todo iba bien", sentencia. "Se trataba de un barco de madera muy antiguo, sin ninguna seguridad, sin GPS ni radio ni ningún instrumento de navegación".
OCHO HORAS A NADO ANTES DE SER RESCATADOS
Una vez allí, y ante la imposibilidad de contactar con la Embajada de España en Yakarta, Rafael y María escribieron un mensaje en la página de Internet de la representación española: "Somos dos españoles. Hace dos noches se hundió el barco en el que viajábamos de Lombock a Labuan Bajo. Nadie nos rescató. Tuvimos que ir nadando a la costa durante ocho horas. Estamos en Bima, Sumbawa, con la Policía. Por favor contactar con nosotros urgentemente".
ALGUNOS SUPERVIVIENTES ALCANZARON UNA ISLA CERCANA
Otros supervivientes sufrieron más si cabe antes de poder ser rescatados. Es el caso de dos de los pasajeros neozelandeses, que nadaron hasta una isla cercana. "Los mejores nadadores optaron por nadar hasta tierra porque pensamos que lo conseguiríamos, y afortunadamente así fue, aunque por muy poco. Nadie vive allí, es una isla con un volcán activo que, durante toda la noche, escupía lava caliente. Sedientos tras varias horas en el mar, optaron por beber su propia orina, "Necesitamos beber, así que a veces hay que hacer lo que hay que hacer", declara Tony Lawton.