José Luis Cava inicia su análisis preguntándose si ha pasado ya el momento de máximo pánico de Bitcoin y cuándo se formará un suelo. Afirma que Bitcoin es “un activo macro” y que su cotización depende de la liquidez. Explica que existen dos vías por las que la liquidez le afecta: la situación de los market makers, que “está tocada” tras el “varapalo del 10 y el 11 de octubre”, y la retirada de liquidez por parte de “Bessent y Powell”.
Se centra en la evolución del saldo de la cuenta del Tesoro en la Fed. Recuerda que a mediados de agosto estaba en 0,5 billones y que el 29 de octubre alcanzó 0,957 billones. Afirma que esta liquidez “se ha detraído del sistema” y que la contracción impacta en Bitcoin con “60 días de retraso”.
Por ello sostiene que “el impacto máximo” se ha producido en la primera quincena de noviembre y mantiene su opinión de que “las bolsas van a acabar el mes de noviembre bien”. Subraya que “Bitcoin no cae porque esté mal. Bitcoin cae porque hay un señor que se llama Bessent que ha retirado del sistema 600 y pico mil millones”.
Sobre cuándo podría formarse un suelo, calcula que, si la reducción de liquidez registrada en octubre comienza a revertirse, “como pronto podría ser en diciembre”. Apunta al índice dólar, que “no ha parado de subir”, como señal de detracciones de liquidez.
Respecto a los fundamentales del ecosistema cripto, afirma que “son buenos” y que la liquidez en stablecoins “está marcando máximos históricos”, pero insiste en que los market makers “están groguis”. En cuanto al sentimiento, señala que los indicadores muestran “pánico” y que “lo que falta es la capitulación final”. Destaca que MicroStrategy cotiza “por debajo del valor neto contable” de sus Bitcoin, lo que interpreta como “pánico en estado puro”.
Añade que el Coinbase Premium Index muestra “lecturas históricas negativas”, indicando ventas desde Estados Unidos. Sobre los ETF, recuerda que el IBIT registró “una salida histórica”, pero considera que todavía no se ha producido la capitulación final.
Al examinar los costes medios de compra —“84.000” para quienes entraron en IBIT y “77.000” para Saylor— sostiene que, si el precio cae por debajo, “las ventas se pararían un poquito”. A nivel técnico, observa que Bitcoin ha caído a “la base del canal” mensual y que, aunque se han roto soportes, no cree que el ciclo iniciado en 2022 haya terminado. Señala que el RSI semanal muestra niveles de sobreventa similares a los de “julio y diciembre de 2022”, por lo que cree que Bitcoin está “cerca de un suelo”, aunque “todavía no he visto el suelo”.
Concluye que la caída se debe a que “dos tíos han retirado liquidez del sistema”, que Bitcoin “sigue siendo útil” y que su experiencia le ha mostrado que las grandes oportunidades se dan “cerca de un suelo”. A corto plazo piensa que Bitcoin “puede seguir cayendo”, pero insiste en que no se ha roto la tendencia de medio y largo plazo.