En la estructura de largo plazo se ve un movimiento bajista de varios años.
En torno a 10 euros en varias ocasiones ha entrado dinero, por lo que podemos determinar que en esta zona hay presión compradora, lo que configura este nivel como importante soporte. De no perderlo, podría realizar un cambio tendencial de cara al medio plazo. Sin embargo, si perdiera los 10 euros, podría debilitarse de forma bastante fuerte.
Desde el mes de julio estamos observando un movimiento alcista. La semana pasada la directriz alcista principal se perforó. La tendencia alcista de más corto plazo se habría roto y, de no superar los 12 euros, comenzaría un impulso bajista de una dimensión simétrica y que podría llevarnos a buscar niveles de 10,50 euros, que convergerían con la zona de soporte. Para pensar en posibles subidas debe superar los 12 euros y 13,20 posteriormente. Sin embargo, lo más probable es que vuelva a zonas de 10 euros.