Ayer Caixabank
presentó su nuevo Plan Estratégico 2015-2018, una hoja de ruta con la que la entidad catalana crecer un 6% anual en recursos de clientes, reducir su morosidad del actual 9,9% hasta el 4% y potenciar la banca digital. Con ello cree que podrá disparar la rentabilidad del grupo sobre fondos propios hasta el 12%-14%.
Esta mejora de la rentabilidad cree que le posibilitará abonar dividendos extraordinarios que superen el actual 50% de pay out o aplicar programas de recompra de acciones para mejorar la remuneración a los accionistas.
En cuanto a sus participadas, el plan estratégico contempla rebajar el conjunto de paquetes accionariales un 5%, hasta que sólo supongan el 10% del consumo de capital.
Pese a este plan estratégico tan ambicioso, los inversores siguen sin ver claro el rumbo de Caixabank en bolsa y, es que, el valor lleva inmerso en un lateral desde que comenzara 2014. Hasta que no rompa los 3,80 euros por abajo o los 4,80euros por arriba, las estrategias factibles tendrán que circunscribirse a este lateral.
Ahora bien, en el corto plazo Caixabank está desarrollando una directriz bajista desde octubre de 2014. El valor ha ido acumulando máximos y mínimos decrecientes y a corto plazo tantea el soporte de los 4 euros. Si lo pierde, caerá peligrosamente a la base del canal lateral.
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Por arriba, Caixabank mejoraría su tendencia a medio plazo si superara la directriz bajista que arrastra desde octubre y la media móvil de 200 sesiones que pasa por los 4,43 euros. (Ver: Indadores Premium Caixabank)
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