Sol, playa, cultura y gastronomía. España reúne varias cualidades para ser una potencia turística, tal y como sucede. Reflejo de los extraordinarios números que registra el país, en llegadas de turistas, gasto u ocupación hotelera, es la buena situación de las compañías dedicadas al sector que cotizan en el mercado nacional. Un grupo de valores muy diverso, que incluye tanto hoteles como líneas aéreas o empresas auxiliares, pero cuya situación financiera es excelente. Lógicamente, las valoraciones ya han recogido estas buenas perspectivas y los múltiplos son exigentes.

Dos de los valores con unos números más elevados son las hoteleras NH Hoteles y Melia Hotels. Con un PER superior a las 53 y las 20 veces, ambas son las únicas compañías del sector con recomendación de compra y potencial positivo, del 19% y del 6%, por parte del consenso de Reuters. Entre las dos cadenas de hoteles, la mayoría de analistas se decanta por NH, al ser la favorita para protagonizar una operación corporativa. Tal y como explica Antonio Aspas, socio de Buy&Hold, “su principal accionista, el grupo chino HNA, se encuentra en una posición de debilidad y ha puesto su paquete de acciones a la venta; lo que junto a que otro de sus principales accionistas sea el hedge fund Oceanwood, hace muy posible una operación de compra de un competidor”.

Precisamente, la cadena tailandesa, Minor Hotels, ha irrumpido recientemente en NH con la compra a Oceanwood de 30 millones de acciones, que representan el 8,6% del capital de la hotelera española, por unos 190 millones. La compra de este paquete de acciones coloca a Minor como el tercer accionista de referencia, por detrás del HNA, con un 29,5%, y el grupo Hesperia, con un 9%. Y todos estos movimientos se producen después de que, hace unos meses, Barceló ofreciese a NH la fusión de sus negocios, operación que finalmente no se produjo.

Por técnico, Susana Felpeto, subdirectora de renta variable de Atl Capital, también se decanta por NH, al tener “una tendencia alcista más clara y estar en la parte máxima de los últimos 10 años” y asegura que si la hotelera “no pierde los 6 euros, podemos tener un salto en cuanto a precios de cotización importante”.

Otro ejemplo claro de que apostar por el turismo español en bolsa no es una inversión low cost es Amadeus. Los analistas advierten de que la acción ha subido mucho en los últimos meses, por lo que no consideran que sea una oportunidad de inversión, al menos en el corto plazo. Felpeto, subraya que “si se tiene posición, la mantendríamos sin ninguna duda, pero Amadeus está en máximos y en máximos no entraríamos”. Y es que el valor ha subido más de un 10% desde enero, hasta superar los 66 euros por acción.

La CFA de Link Securities, Paula Sampedro, destaca que el posicionamiento de Amadeus en su industria es muy fuerte, siendo capaz de defender su negocio con las aerolíneas, a pesar de los intentos de estas de reducir su dependencia a los GDSs, los sistemas informáticos de reserva. Al mismo tiempo, la compañía proveedora de soluciones tecnológicas está abriendo nuevas líneas de negocio, como la plataforma hotelera que tiene previsto lanzar a finales de año.

IAG: la compra de Norwegian puede ser "un catalizador muy potente"

El crecimiento de Amadeus y el de IAG son similares, al ser uno un gestor turístico y el otro un holding de aerolíneas, y parece que en cuanto a números también, porque la matriz de Iberia sube más de un 10%, situándose en el entorno de los 8 euros. En los últimos años la compañía ha vivido un proceso de crecimiento mediante adquisiciones que continúa desarrollando. La última operación de la empresa que preside Willie Walsh ha sido la compra del 4,61% de Norwegian, aerolínea que podría terminar opando, tras intentar hacerse con Air Berlin y Niki. Sergio Giménez, analista de XTB, considera que “a corto plazo está operación puede suponer correcciones de su valor; mientras que a medio y largo plazo, puede ser un catalizador muy importante, ya que supone una expansión de su negocio a nivel internacional”. Entre 2012 y 2015 IAG compró Bmi, Vueling y Aer Lingus.

IAG es una de las principales posiciones de Buy&Hold, algo que Aspas defiende argumentando que la compañía tiene a su favor “una valoración muy atractiva, una excelente directiva con una probada trayectoria y la concreción que está habiendo en el sector, con fusiones de compañías en quiebra”.

Aena debería seguir internacionalizándose

La compañía española del sector con una peor evolución en el parqué en 2018 es Aena, que se apunta una revalorización inferior al 1%. La cotización del gestor aeroportuario se ha visto afectada en las últimas semanas de mayo por los primeros movimientos en su capital desde que salió a bolsa. The Children’s Investment Fund (TCI), su segundo accionista tras el Estado, ha vendido un 2,6% de su participación en Aena, manteniendo el 8,3% de la compañía, lo que puede interpretar como que el fondo está recogiendo parte de las plusvalías acumuladas pero que siguen confiando en el valor.

Los dos máximos inversores de la compañía no atraviesan por su mejor momento, tras el rechazo del Gobierno a que Aena optase a hacerse con el control de Abertis, negativa tras la que se produjo la dimisión de su hasta entonces presidente, José Manuel Vargas. El Ejecutivo designó en su lugar al ex secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, nombramiento que Sampedro entiende como “el reflejo de la voluntad del Gobierno de no privatizarla”.

En cuanto a los planes de crecimiento de Aena, los analistas coinciden en que la compañía debería seguir internacionalizándose para optimizar su posición financiera, y aplauden la decisión de no comprar el 49% que aeropuerto británico de Luton que está en manos del fondo de inversión francés Ardian, al no considerar aceptables las condiciones ofrecidas.

Aspas hace hincapié en que “la capacidad de crecimiento de Aena en España es muy limitada, reduciéndose básicamente a los desarrollos inmobiliarios en Barajas y el Prat que ha anunciado recientemente”, con lo que son dos opciones las que le quedan para el importante flujo de caja que genera: la inversión en activos extranjeros o aumentar aún más el dividendo, tras subirlo al 80% del beneficio este año.

Así, aunque hay diferencias entre compañías, los analistas coinciden en las empresas turísticas cotizan a unos ratios elevados por lo que quizá en estos momentos no sean una buena opción de compra. ¿Usted ya está dentro de alguno de estos valores? Enhorabuena, estos valores son una excelente opción para tener en cartera: resultados, previsiones sobre turismo, subidas en bolsa... Si no lo ha hecho, puede que lo mejor sea irse de vacaciones y esperar para invertir al verano que viene.