Las torres incluidas en los dos lotes adquiridos se integran efectivamente en Cellnex y pasan a ser operadas por la empresa, en un proceso gradual que permita completar los procedimientos administrativos con los propietarios de las emplazamientos en los que se localizan las torres y, en su caso, las administraciones locales. Este proceso de incorporación, iniciado este pasado mes de septiembre, se extenderá hasta mediados de 2017.
Tal y como se informó en el momento del acuerdo, la operación abre una vía de colaboración a largo plazo con uno de los principales operadores de telefonía móvil en Francia. La adquisición de este portafolio de torres va acompañada de un contrato de prestación de servicios de Cellnex a Bouygues Telecom que se extiende por un periodo de 20 años.
Las 500 torres adquiridas aportarán unos ingresos, en los primeros 12 meses completos (“run rate”), en torno a los 13 millones, incluyendo los servicios a otros clientes.