José Luis Cava comienza feliz, ya que indica que “los índices están subiendo con fuerza, el oro también, la plata ya no digamos, el cobre también” y “Bitcoin está tratando de dibujar una configuración de suelo”.
Cava centra su análisis en la subida del S&P 500, recordando que en abril se anunciaba una recesión. Señala que desde los mínimos del 7 de abril el índice ha subido un 43,75%, y que está “a tan solo 19 puntos de marcar un nuevo máximo histórico”. Para él, “esto es una fiesta… tendencia alcista en estado puro”, lo que hace “muy probable que el S&P 500 cierre el año en torno a los 7.000”.
Sobre los Siete Magníficos, recuerda las advertencias de burbuja de Michael Burry, pero insiste en seguir el precio: han subido un 67,5% desde abril, “y toda esta subida se ha producido con lecturas de miedo extremo entre los inversores”. Explica que el miedo procedía de inversores institucionales que “se creyeron el rollito macabeo de la caída en recesión”, mientras que “los inversores particulares siguieron la tendencia”.
Atribuye la reciente pausa de los Siete Magníficos a “la retirada de liquidez por parte de Bessent y “por parte de Powell”. Señala que no solo Bessent, sino también Powell ha comenzado a comprar “40.000 millones de pagarés del Tesoro”, algo que considera positivo ya que “inyecta liquidez en el sistema”. El experto cree que estas inyecciones se mantendrán “al menos hasta abril” y probablemente hasta mayo.
En su opinión, la liquidez necesaria incluso podría aumentar: “si la economía de Estados Unidos se acelera, se necesitará más liquidez”, si la deuda pública sigue creciendo también, y si el Banco de Japón restringe liquidez, “deberán compensar”. Asegura que “han puesto en marcha la máquina de impresión del dinero a toda velocidad”.
Sobre qué activos lideran la subida, destaca el ETF del Russell 2000 (IWM), que está “marcando nuevos máximos históricos” y ha subido “casi un 41%”. El Dow Jones también marca máximos y ha subido un 33%. Concluye que “esto está funcionando bien, que las tendencias son alcistas”.
Analiza el oro, la plata y el cobre: el oro “responde con alzas a las inyecciones de liquidez”, la plata “marcando máximos históricos”, y el cobre muestra fuerza tras un largo movimiento lateral, lo que para el analista anticipa demanda industrial y acelera la actividad económica.
Finalmente, se pregunta: “Si está subiendo todo, ¿por qué no va a subir Bitcoin?”. Asegura que “el suelo se está formando ahora” y que la resistencia clave está en 94.500, donde “está todo el mundo vendido de opciones call”. Concluye que si supera ese nivel, “lo más probable es que se vaya a 100.000”.