EURO CONTRA DÓLAR
En el mercado de divisas la puesta en circulación de más euros con llevará que la divisa europea se deprecie. Hay que tener en cuenta que el BCE considera que el tipo de cambio más débil es una vía clave para apoyar el crecimiento. Así que es probable que el declive del euro se acelere y, por el contrario, las subidas las coja el dólar. De hecho Mickael Benhaim, director global de renta fija de Pictet AM,
cree que una de las mejores formas de beneficiarnos del QE es tomar posiciones cortas en el euro frente al dólar, aunque el par ya ha llegado a marcar mínimos en 1,14.




BANCO EUROPEOS, EXPORTADORAS Y COMPAÑÍAS ENDEUDADAS
Los bancos de la Zona Euro pueden ser los primeros en beneficiarse, afirma Mickael Benhaim, director global de renta fija de Pictet AM, ya que el drenaje de liquidez desde el BCE se espera que favorezca la concesión del crédito –su principal y más lucrativo negocio-, tanto a familias, como a empresas.


Además, Sara Carbonell, relationship manager de CMC Markets, opina que “al fluir el crédito, aumentará también la producción de las empresas y por tanto las necesidades de compras al extranjero (a pesar de que con un euro débil nos salgan más caras. Por supuesto aumentarán en menor medida que lo harán las exportaciones). Las exportaciones también se incrementarán, lo que beneficia a nuestras empresas exportadoras, pero también a las empresas externas que les sale mucho más barato comprar aquí. Vamos, que con la globalización todo es un engranaje que está interrelacionado, si la economía se activa en Europa afecta al resto del mundo”.

También el QE hará que se reduzcan las primas de riesgo y la rentabilidad de los bonos, especialmente periféricos. Se puede extender este efecto a la deuda privada que, de momento, no es objeto de compra, beneficiando así a las compañías más endeudadas, tipo constructoras, que podrían financiarse más barato.

Ahora bien, para ver estos efectos tendremos que esperar tiempo…es más, como destaca Bart Van Craeynest, economista jefe de Petercam, “el hecho de si el QE realmente ayudará a la economía real sigue siendo muy incierto”.


ECONOMÍA AMERICANA
Aunque al otro lado del Atlántico ya están retirando los excesos de liquidez inyectados por la Fed vía QE desde finales de 2008, también EEUU se verá repercutido positivamente por el QE europeo.

Draghi no sólo ha lanzado un flotador a la economía europea, también a la estadounidense pues, aunque se le dé dinero a los bancos europeos, éstos usen parte para sacar provecho prestando en países donde la demanda es más solvente, como EEUU. Además, Miguel ángel Bernal, profesor del IEB, afirma que “el dinero que se promocione a los bancos se canalizará también para comprar bolsa americana o activos americanos porque el FMI dice que es la única economía que va a crecer”.
Desde ETX consideran que el QE tendrá “un efecto inmediato más bien negativo en las otras economías porque depreciará al euro y hará que nuestras importaciones sean más onerosas, lo que perjudica a los exportadores de otros países”. Esto a corto y medio plazo, sin embargo, a más largo plazo, “la abundancia de dinero canalizada a través de los bancos centrales o de los gobiernos de cada país de la eurozona junto con el impulso a las exportaciones por la devaluación técnica del euro, debería en un plazo más largo favorecer a las otras economías”.


WALL STREET Y BOLSAS EMERGENTES
La reacción inmediata de la bolsa europea al anuncio de los planes de compra de deuda por parte del BCE fue muy tibia, debido a que no gustó que el BCE dijera que sólo asumirá un riesgo del 20%, frente al 80% que tendrán que soportar los bancos centrales de cada país. Esta discreta reacción conllevó que Wall Street y otras bolsas emergentes reaccionaran también de forma discreta.

Pero esto sólo ha sido la consecuencia de corto plazo. Cuando vaya fluyendo el dinero que inyecte el BCE, las compras también se notarán más allá del Viejo Continente. Como comenta José María Luna, director de análisis de Profim EAFI, “más liquidez al sistema podría beneficiar a otras bolsas mundiales que ofrezcan buenas perspectivas, ya sea en EEUU, por sus datos de crecimiento económico, aunque las bolsas de USA no están nada baratas; y algún emergente menos dependiente de precios de materias primas y que esté acometiendo reformas estructurales importantes”.


RENTA FIJA EUROPEA Y MUNDIAL
Evidentemente, el BCE con su mutualización de la deuda pretende reducir el riesgo o, más bien, compartirlo para repartirlo. Esto conllevará consecuencias directas en la deuda. De hecho, ya lo notamos en el momento preciso que Draghi comenzó a explicar los detalles del QE, pues la rentabilidad del bono español marcó mínimos históricos en el 1,46%. José María Luna cree que este efecto continuará: “podría bajar algo más las rentabilidades de los bonos, sobre todo, de países de la periferia de la zona euro como son España o Italia y algo Portugal. Además, también tendrá efecto sobre la renta fija privada, de la zona euro sobre todo de plazos medios”.

Además la liquidez que inyecte el BCE también podría canalizarse a la deuda de otros países fuera de la unión europea. Al hilo, Daniel Pingarrón, estratega de mercados de IG, nos recuerda que “cuando el Banco de Japón comenzó el Abenomics, parte de ese dinero nuevo vino a Europa y en concreto, a la deuda española, que bajó su rentabilidad”.


ORO
La reacción del metal precioso fue alcista en un primer momento y rompió los 1.300 dólares por onza, ¿por qué? “porque Draghi decepcionó –por la baja mutualización de la deuda- y el oro ha funcionado como activo refugio, pues los inversores, después de lo del franco suizo, necesitan algo en lo que creer”. Sin embargo, si finalmente la liquidez surte efecto, engrasa la economía europea y aumenta la inflación, entonces los inversores no tendrán qué temer, darán la espalda a los activos refugio y apostarán por los cíclicos.