La racha alcista del Oro este año llegará a su fin en los próximos trimestres, según los analistas de Citigroup, que pronostican que el metal amarillo caerá por debajo de los 3.000 dólares la onza.

“Nuestro trabajo sugiere que el oro volverá a situarse entre los 2.500 y los 2.700 dólares la onza para el segundo semestre de 2026”, afirmaron analistas de Citigroup, entre ellos Max Layton, en un informe recogido por Bloomberg. La caída podría deberse a una menor demanda de inversión, la mejora de las perspectivas de crecimiento mundial y los recortes de tipos de interés por parte de la Reserva Federal, explican.

El oro se ha disparado casi un 30% este año hasta situarse actualmente al borde de los 3.400 dólares la onza, y eso que ha perdido algo de fuelle tras haber alcanzado un máximo histórico en abril por encima de los 3.500 dólares. La caótica política arancelaria del presidente de EEUU, Donald Trump, y las más recientes tensiones en Oriente Medio han impulsado la demanda de activos refugio. El ascenso del metal también se ha visto favorecido por la preocupación por el déficit y los activos estadounidenses, así como por las compras constantes de los bancos centrales en su búsqueda de diversificar las reservas. 

Sin embargo, Citigroup augura una disminución de la demanda de inversión en oro a partir del cuarto trimestre de 2025, que responderá a “cualquier mejora modesta en la confianza del crecimiento global” a medida que entre en vigor un presupuesto estadounidense de estímulo y las políticas comerciales de Trump se vuelvan menos pesimistas, según los analistas de Citi. Además, “vemos un amplio margen para que la Fed reduzca su política de restrictiva a neutral”, añaden.

En el escenario base del banco, con una probabilidad del 60%, se espera que el oro se consolide por encima de los 3.000 dólares la onza durante el próximo trimestre y luego baje. Su escenario alcista, con una probabilidad del 20%, indica la posibilidad de un nuevo récord en el tercer trimestre debido a las preocupaciones sobre aranceles, geopolítica y estanflación. El escenario bajista, también con una probabilidad del 20%, augura una ola de ventas, en parte debido a la rápida resolución de los aranceles.